En un año en que la discusión del proyecto de Ley Nacional del Cáncer ha creado un nuevo escenario, los oncólogos tenemos un desafío importante no sólo clínico, sino también social para hacer que las políticas públicas sean exitosas y beneficien a la mayor cantidad de chilenos.

Nos estamos preparando para hacemos cargo del problema que significa enfrentar una patología que en los próximos años llegará a ser la primera causa de muerte en el país. Hoy tenemos grandes desafíos para los que urge tener en todo Chile profesionales preparados y en sintonía con las necesidades de los pacientes.

Para eso, instancias como el IV Congreso Chileno de Oncología nos permiten no sólo fijar y discutir estos puntos con la mayoría de nuestros socios, sino también actualizar los conocimientos oncológicos a todos los profesionales dedicados a tratar pacientes con cáncer.

Como Sociedad Médica nos interesa aprender de nuevas drogas, su uso y complejidades, como es el caso de inmunoterapia; actualizar el manejo de los principales cánceres que nos afectan como país, como el cáncer de pulmón, ovario, páncreas e hígado; entender si las políticas públicas tienen un rol en el crecimiento o disminución de ciertos cánceres y, finalmente, comprender cuáles son los desafíos para la prevención y tratamiento del cáncer en el país, a través de plan nacional del cáncer y la propuesta de ley nacional cáncer.

Creemos que entregar un conocimiento actualizado al cual puedan acceder todos los profesionales dedicados a la materia, no sólo aumenta la especialidad y capacidad de curar a nuestros pacientes, sino que además aporta a nuestro rol de ser colaboradores de la autoridad a la hora de crear una ley o reglamento que permita acortar la brecha en que se ven enfrentados los pacientes con cáncer.