La cancelación de la COP25, reunión donde se debatirían temas como el reglamento que determine la aplicación del Acuerdo de París, los desastres naturales y las metas de reducción entre otros, produjo variadas reacciones en el mundo de las organizaciones ambientales.

Uno de ellos es la organización conservacionista independiente World Wildlife Fund (WWF, Fondo Mundial para la Naturaleza en español), que lamentó la suspensión del evento, e hizo un llamado a "continuar trabajando por una acción climática urgente y ambiciosa, que incorpore fuertemente el ámbito social".

"Nunca antes en Chile habíamos visto tanta consciencia ambiental y preocupación por la justicia y equidad en el acceso, uso y manejo sustentable de nuestros recursos naturales. Realizar la COP25 en el país era un sueño para quienes trabajamos por la conservación y lamentamos profundamente que se haya suspendido, pero comprendemos plenamente las razones y el contexto en que esta decisión ocurre. Sin embargo, esto no debe bajar la urgencia que tiene seguir empujando los temas ambientales y sociales, tanto en la COP como en otras instancias internacionales, así como en nuestras leyes, en nuestra gobernanza ambiental, y en nuestro día a día como ciudadanos conscientes", indicó Ricardo Bosshard, director de WWF Chile.

"La actual crisis climática es un desafío global que reproduce y exacerba las actuales inequidades sociales, por tanto sigue siendo muy relevante trabajar por una acción climática urgente y ambiciosa, lo que creemos debe estar dentro de las prioridades para construir un Chile más justo y una planeta en que podamos vivir en armonía con la naturaleza", puntualizó.

Greenpeace en tanto, se mostró más enérgico con la suspensión anunciada este mediodía por el Presidente Piñera: "Hemos perdido una oportunidad única para la historia del país. Se trataba del evento que asumiría los compromisos y desafíos de la emergencia climática que enfrenta el mundo y de manera especial Chile, en una decisión que fue tomada a puertas cerradas y sin atender lo que las organizaciones civiles le traspasamos al gobierno", señaló Matías Asún, director nacional de Greenpeace.

"El anuncio hecho por el presidente es todavía más complejo si consideramos que desde la Sociedad Civil por la Acción Climática, que agrupa a más de 150 organizaciones en Chile y de la cual Greenpeace en Chile es miembro, habíamos manifestado al gobierno la importancia para Chile de realizar la COP en un marco de seguridad, protección de los Derechos Humanos y libre expresión", agregó.

Asimismo, Greenpeace indicó que cancelar la COP25 no puede ser sinónimo de despreocupación por la grave emergencia climática que vive el país. "No hacer la COP25 no puede impedir discutir las gravísimas injusticias ambientales que enfrenta nuestro país", dijo Matías Asun.

"Por el contrario: se debe reforzar la necesidad de ubicar los temas medioambientales entre las prioridades del gobierno. En eso no se puede equivocar el presidente Piñera ya que se trata de demandas que tienen que ver con el corazón de las injusticia y desigualdades a las que han estado sometidos miles de chilenos, por ejemplo, en las zonas de sacrificio", añadió.

Finalmente, Greenpeace enfatizó en la consternación a nivel internacional por la suspensión del evento, al ser visto como una muestra de aislamiento en un escenario que requiere del apoyo de la comunidad internacional.

"No será fácil superar este fracaso que se acerca a un verdadero papelón internacional", finalizó Asun.