Imágenes tomadas en la zona de extracción de muestras del rover Perseverance de la Nasa en Marte han sorprendido a los científicos de la misión porque una muestra algo parecido a un pelo.

Información descargada el 4 de agosto desde Perseverance mostraba que se había extraído, sellado y almacenado con éxito la muestra número 12 de la misión.

Como siempre hace el equipo, se tomaron imágenes de varios componentes del sistema de recolección de muestras después de completar la actividad de extracción de muestras.

En esas imágenes, se veían dos pequeños fragmentos de escombros: un objeto pequeño en la broca sacanúcleos (almacenada en el carrusel de brocas) y un objeto pequeño como un cabello en el portabrocas.

La imagen del extraño pelo enredado en uno de los instrumentos del rover. La imagen fue captada por una de las cámaras ubicadas en el mástil del vehículo. Foto: Nasa

Según informa la Nasa, el equipo ahora está investigando su procedencia y si se originaron en el rover o en escombros externos del sistema de entrada, descenso y aterrizaje (EDL) que se desechó al comienzo de la misión. Se analizan imágenes del del espacio de trabajo (la superficie directamente en frente del rover) para ver si hay restos de objetos extraños visibles. Y la torreta al final del brazo robótico se girará para que se puedan obtener imágenes del portabrocas y el carrusel de brocas desde ángulos más oblicuos.

También se están considerando imágenes adicionales y otras actividades de diagnóstico necesarias para comprender mejor la naturaleza de estos objetos.

El ambicioso viaje del rover

El rover Perseverance de la Nasa suma un año en Marte, pero después de una etapa introductoria, ahora comenzará una nueva misión descrita como la más importante desde que está en suelo marciano. El vehículo autónomo tendrá que subir a un montículo de un antiguo delta que formó un río marciano para recolectar rocas que podrían albergar signos de vida extraterrestre que pudo existir en la superficie del planeta rojo hace millones de años.

El viaje que comenzó el 14 de marzo, y en el cual el robot recorrió 5 kilómetros, a un antiguo delta de un río dentro del cráter Jezerodonde existió un lago hace miles de millones de años.

Esta imagen de la carcasa trasera y el paracaídas supersónico del rover Perseverance de la Nasa fue capturada por el helicóptero Ingenuity durante su vuelo número 26 en Marte el 19 de abril de 2022. Foto: Nasa

Este delta es una de las mejores ubicaciones en Marte para que el rover busque signos de vida microscópica pasada, ya que el cráter de Jezero fue una especie de lago en el pasado, por lo que “es un lugar ideal donde poder buscar restos de vida si es que las hubo en el pasado remoto de Marte”, dijo en una nota a Qué Pasa, Juan Carlos Beamínastrónomo de la Fundación Chilena de Astronomía.

“Si pensamos en la Tierra, los ríos y las lluvias arrastran cuerpos y elementos de vida y quedan en los lechos como los lagos, esto es lo que esperaríamos encontrar en este cráter, aunque más que encontrar un esqueleto (que es lo que encontraríamos acá) las evidencias en Marte probablemente sean elementos orgánicos incrustados en las rocas”, añadió el astrónomo.

Por ello, usando un taladro en el extremo de su brazo robótico y un complejo sistema de recolección de muestras en su vientre, Perseverance estará recolectando núcleos de roca para regresar a la Tierra, la primera parte de la campaña Mars Sample Return, un proyecto que busca enviar una nave espacial al planeta rojo para recoger las muestras recolectadas por el rover.

Asimismo, el robot deberá “empaquetar” las muestras recolectadas, para que a fines de esta década sean enviadas a la Tierra y así puedan ser analizadas en profundidad.

En las rocas marcianas, explicó Beamín, se puede encontrar mucha información, “en particular las muestras que se recolectarán en el delta del cráter podrían tener huellas o rastros de elementos orgánicos que nos ayudarían a estudiar la posibilidad de que hubiese habido vida en el pasado de Marte. Sin estos análisis de las rocas y polvo marciano sería simplemente imposible saber si hubo alguna vez vida allí”.