Un melanoma es un tumor canceroso que se ve como un lunar y es el tipo de cáncer que tiene mayor índice de mortalidad dentro de los cánceres de piel.
En la última década, el número de personas fallecidas en Chile por cáncer de piel superó las cuatro mil víctimas, siendo los hombres más de la mitad de los casos, según cifras entregadas por la Sociedad Chilena de Dermatología.
La razón fundamental por la cual es tan peligroso, es porque las células de un melanoma pueden propagarse fácilmente a través del cuerpo. Una vez que llegan a los ganglios linfáticos, puede extenderse a otros órganos vitales, como a los pulmones.
La mayoría de los melanomas surgen en nuevos lunares y que solo el 25% se producen en ya existentes. Los nuevos lunares aparecen en la mayoría de los casos por la exposición solar sin utilización de fotoprotector.
Las personas con antecedentes de quemaduras solares frecuentes tienen un riesgo más alto de melanoma, sobre todo en aquellos de piel clara, pelo rubio o pelirrojos, y/o con un historial familiar de melanoma.
Desafortunadamente, los nuevos lunares a menudo son pasados por alto y los que has tenido pueden cambiar sin que te des cuenta. Sin embargo, el cambio es un indicador importante de este tipo de cáncer de piel y detectarlo a tiempo puede salvar tu vida.
Existe un método para la detección precoz de melanoma para evitar que se vuelva maligno. Si una persona tiene un lunar con las siguientes características debe acudir de forma inmediata donde un especialista:
- A de Asimetría: Si el lunar es desigual o no corresponde a su otra mitad.
- B de Borde: Si los bordes del lunar son irregulares o poco definidos.
- C de Color: Si tiene dos o más colores o una tonalidad poco uniforme.
- D de Diámetro: Los lunares normales tienen típicamente un tamaño menor a 6 milímetros. El crecimiento también es un signo de preocupación.
- E de Evolución: Si cualquiera de las características anteriores cambia, sobre todo de forma brusca.
Si bien se puede usar esta regla como referencia, lo recomendable es consultar a un dermatólogo ante cualquier sospecha.
El diagnóstico precoz es crucial para el tratamiento de los melanomas. Incluso si visitas a tu médico para chequeos regulares, es importante inspeccionar pecas y lunares cada ciertos meses para ver si alguno de ellos ha cambiado de forma o aumentado su tamaño.
* Cirujano de cabeza y cuello de Clínica Santa María
** Jefa de Dermatología y especialista en cáncer a la piel de Clínica Dávila
*** Dermatólogo de Vidaintegra