Pasar demasiado tiempo a solas tiene un impacto sobre nuestro comportamiento social y es un fenómeno cultural que va en aumento, según un estudio científico que revela que algunas personas, "sobre todo aquellas con poca estabilidad emocional", pueden verse especialmente afectadas por ello.
"En la sociedad de hoy los cálculos indican que la gente pasa entre un tercio y la mitad de su tiempo sola cada día", señala en un comunicado la universidad israelí de Bar Ilan, que ha encabezado una investigación publicada en la revista Journal of Personality and Social Psychology.
El estudio, basado en pruebas realizadas a 700 personas, indica que algunas "perciben el tiempo a solas como si su entorno social las descuidara", se sienten mal por ello y les induce "a pensar que solo pueden confiar en sí mismas", lo que se puede expresar en un comportamiento "cada vez más egocéntrico y egoísta".
Esto obstaculiza "su capacidad de reintegrarse en actividades sociales" e incrementa las posibilidades de que sean rechazadas. Según los investigadores, esta tendencia es un fenómeno cultural que está creciendo, lo que puede tener un impacto nocivo y aumentar la problemática de la alienación social.
"Cuando piensan en sí mismos solos, estos individuos experimentan una capacidad reducida para confiar en los demás", lo que aumenta su nivel de desconfianza en relación al mundo social, argumenta Liad Uziel, doctor del Departamento de Psicología de la Universidad de Bar Ilán y coautor del estudio.
Para revertir esta situación, remarcan los investigadores, es importante reconocer la dinámica entre la necesidad de relacionarse socialmente y la experiencia de estar a solas entre aquellos con un equilibrio emocional más bien bajo, lo que puede ayudar a crear mecanismos para mejorar su bienestar personal.