¿Es posible lograr un divorcio sin conflictos?
Hablar a través de un psicólogo y un abogado experto en familia puede ayudar a las parejas que se separan a tomar decisiones conciliadas con un mínimo de conflicto.
Las estadísticas muestran que, en Chile, tres de cuatro matrimonios terminan en un divorcio. Y, más allá de los números, la sabiduría popular da cuenta de que nadie se casa esperando fallar.
Aun así, los datos disponibles indican que en la última década la cantidad de separaciones en parejas casadas con 5 años o menos de matrimonio creció en casi un 50% y que aumentó también la cantidad de separaciones en parejas con 20 años o más de matrimonio.
Es indesmentible que la separación y el divorcio son emocionalmente eventos difíciles. Pero igualmente cierto es que sí es posible tener una ruptura saludable y consciente.
Una separación, un divorcio, no solo se trata de un trámite legal racional como lo es el cese de convivencia, de apartar casa, de fijar pensiones alimenticias y visitas. Es mucho más que eso. Hay diversas, y a veces contradictorias, emociones involucradas tanto sobre el quiebre como sobre los hijos.
Hay además aspectos económicos y de estilos de vida a considerar, como consecuencia de la inevitable necesidad de reacomodar el presupuesto para mantener dos casas separadas
Y por eso, es una situación de vida que debe ser abordada profesionalmente de manera integral, con las herramientas que nos entregan las disciplinas como el derecho y la psicología de familia, así como los conocimientos de las finanzas personales.
Las tendencias mundiales dan cuenta de que la separación tiene que ser mirada y resuelta trabajando en equipo en la construcción de propuestas personalizadas para poder ayudar en cada caso a tomar acciones concretas en lo legal, emocional y económico que sean congruentes con una mirada puesta en el largo plazo, buscando el bienestar, resolver los conflictos y cerrar ciclos.
Las personas que se separan y sus hijos pueden beneficiarse mucho de una buena guía profesional e integral para ayudarlos a manejar sus emociones y adaptarse a los cambios. Esta guía psicológica, también puede ayudar a los adultos a hacer el duelo del término de la relación de pareja y en la reflexión de lo ocurrido para evitar repetir patrones negativos.
Conversar con su ex pareja puede ser lo último que una persona en vías de separación desee hacer, pero la cooperación y la comunicación guiada por profesionales permiten realizar un cierre y avanzar de una manera menos difícil para todos los involucrados.
Hablar a través de un psicólogo y un abogado experto en familia puede ayudar a las parejas que se separan a tomar decisiones conciliadas con un mínimo de conflicto.
Por otra parte, las finanzas familiares deben mantenerse en un nivel racional para evitar que la calidad de vida de los miembros de la familia disminuya post conflicto. El bienestar de sus miembros es la premisa con la que se debe mirar todo el proceso de decisiones financieras respecto de la separación.
Cada caso es una historia particular. Pero siempre después de un divorcio o una separación, especialmente cuando hay hijos, la familia seguirá existiendo. Y por ello es imperativo hacer el máximo esfuerzo para encontrar una disolución inteligente y sana del vínculo legal, afectando lo mínimo posible a su entorno familiar y a ellos mismos y protegiendo, ciertamente, el vínculo emocional.
No hay secretos. Pero sí fórmulas. Y una de ellas es enfocar las fuerzas en cerrar los ciclos de la manera menos destructiva posible, disminuyendo costos emocionales, resolviendo diferencias y llegando a acuerdos provechosos y sostenibles en el tiempo, pensando en el bienestar personal y de los hijos.
* Abogada, magíster en Derecho de Familia y directora jurídica de DeFam.
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