¿Qué es la Inteligencia Artificial Generativa? Estudio muestra los empleos más expuestos a esta tecnología

Desde que el campeón mundial de ajedrez, Garry Kasparov, se enfrentó en 1996 a un juego contra un computador de IBM, el desarrollo de tareas que puede hacer una máquina ha crecido a pasos agigantados. Tanto que ahora la Inteligencia Artificial Generativa (IAGen) es capaz de realizar tareas que han puesto al filo el paradigma del trabajo ¿Seremos reemplazables por una IA?

Antes que todo, ¿qué es la Inteligencia artificial generativa (IAGen)? Se conoce así al tipo de tecnología basada en algoritmos avanzados, como redes neuronales, que permiten crear contenido nuevo y original. Esto incluye texto, imágenes, audio, video o código, a partir de patrones aprendidos en grandes conjuntos de datos.

Es la base de herramientas como ChatGPT o Gemini, que generan respuestas, imágenes o diseños a partir de “prompts” o indicaciones específicas. Son estas herramientas tecnológicas las que incorporadas en los empleos, podrían acelerar las tareas asociadas ¿Cuáles son los empleos que más podrían verse influenciados, expuestos a ser acelerados -o quizás reemplazados- por esta tecnología?

El Centro Nacional de Inteligencia Artificial (CENIA) desarrolló un estudio sobre el impacto de la Inteligencia Artificial Generativa (IAGen) en Chile, especialmente en miras de cómo esta tecnología influye en el mundo del trabajo. Esta investigación fue realizada también junto a Sofofa Capital Humano (Otic), el Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Sence), Ministerio del Trabajo y académicos de la Universidad de Stanford.

Allí se midieron las oportunidades de aceleración generadas por la Inteligencia artificial generativa. Es decir, de disminuir el tiempo de ejecución de las tareas que componen un empleo, a través del uso estas herramientas tecnológicas, en los 100 empleos más comunes de Chile.

Uno de los principales resultados arroja que 4,7 millones de trabajadores y trabajadoras del país pueden acelerar en al menos un 30% las tareas que desempeñan mediante el uso de las herramientas que ofrece la IA Generativa. Esto equivale a decir que un 50% de la fuerza laboral puede mejorar su productividad adoptando la IA. Esto, según proyectaron en el estudio, podría representar un aumento en el valor económico total bruto equivalente al 12% del PIB.

¿Cómo se hizo este hallazgo? El profesor de la Escuela de Negocios de la Universidad de Stanford, Gabriel Weintraub, entregó los detalles del desarrollo de esta investigación. Según expuso, se analizaron las tareas involucradas en cada ocupación para identificar si presentaban un potencial de aceleración con la IA Generativa de acuerdo a dos criterios: si el trabajador puede realizar la tarea con la misma calidad y si lo hace en la mitad o menos del tiempo empleado.

En promedio, el 48% de las tareas en las ocupaciones analizadas tienen potencial de aceleración con IAGen. Los mayores beneficios se observan en áreas como desarrollo de software (87%), análisis de sistemas (80%), especialistas en políticas de administración pública (84%) y docentes de educación media (75%).

De esta última ocupación, los responsables del estudios acotaron que no se trata de que la inteligencia artificial va a reemplazar tareas relacionadas con la educación. Alude a tareas administrativas que los profesores y profesoras deben realizar, que podrían ser optimizadas con el uso de IA, y extender el tiempo disponible para otras tareas relacionadas al trabajo en el aula.

El estudio revela, además, que los empleos con mayores ingresos están correlacionados con una mayor oportunidad con la adopción de la IA Generativa, pudiendo acelerar sus tareas en un 60% o más. Según afirmaron, esto es un fenómeno nuevo, distinto a los que caracterizaron anteriores oleadas de disrupción tecnológica.

En contraste, los empleos de carácter físico, como operadores de maquinaria, pintores y empacadores manuales, presentan menores oportunidades, con una aceleración potencial del 20%.

“Este estudio demuestra que la Inteligencia Artificial Generativa no es una amenaza para el empleo, sino que tiene el potencial de revolucionar cómo trabajamos en Chile, reduciendo tiempos, mejorando la eficiencia y abriendo oportunidades en áreas que antes parecían inalcanzables. Sin embargo, para aprovechar su potencial, es crucial invertir en capacitación”, destacó Rodrigo Durán, director ejecutivo de CENIA.

Rosario Navarro, presidenta de la Sofofa, comentó que “la IA no es solo una herramienta tecnológica, sino un motor transformador para los empleos en Chile. Nos ofrece la posibilidad de aumentar la productividad, mejorar la calidad de los procesos y, sobre todo, preparar a nuestra fuerza laboral para los desafíos de la economía del futuro. Apostar por la capacitación en IA es apostar por empleos más eficientes, creativos y competitivos, lo que no solo beneficia a las empresas, sino que también impulsa el desarrollo sostenible de todo el país”.

Entre las ocupaciones que tienen importantes oportunidades de aceleración, de entre el 30% y 60% de sus tareas, hay 50 que suman 3,5 millones de trabajadores potencialmente beneficiados con inteligencia Artificial. Algunas de estas son: psicólogos, kinesiólogos, vendedores de almacenes, comerciantes, camareros, taxistas, asistentes de aula, inspectores de patio y guardias de seguridad.

Pero, ¿qué tan amenazados están los empleos con la Inteligencia artificial generativa? Si bien los responsables del estudio remarcaron que la IAGen no es una amenaza para el empleo, la línea divisoria entre la automatización del trabajo y la aceleración de tareas mediante esta tecnología está en constante movimiento. Cabe resaltar que ya existen trabajos, como la traducción de idiomas y la asistencia telefónicas, que se han visto arrinconados por la incursión de la IA.

“Es un límite bien difuso. Y aquí nos centramos en la capacidad de acelerar procesos. El reemplazo es un fenómeno que hemos visto en otras ocasiones y que es permanente en la revolución tecnológica histórica y eso se va a repetir significativamente. Lo que nosotros pusimos en foco hoy día es que existe una serie de tareas que no son reemplazables y que son acelerables”, agregó Durán al respecto.

Y esa frontera, según cuenta, está en el tipo de tareas que se están ejerciendo. “Por eso es tan importante la metodología y le dedicamos tiempo a entender que, dada la tecnología que tenemos hoy día, este tipo de tareas no son acelerables por la inteligencia artificial generativa, mientras este otro tipo de tareas sí lo son”, añadió.

¿Y esto podría, además, generar nuevas brechas de alfabetización digital? Considerando que la IAGen ayudará a optimizar tareas, la adaptación a estas tecnologías podría amenazar las aptitudes de trabajadores que no tengan conocimientos vastos en este tipo de herramientas. Al respecto la ministra de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, Aisén Etcheverry, enfatizó que el avance de la incorporación de la IA al mundo del trabajo es algo sumamente relevante.

“No es solo la incorporación de tecnología, sino que cómo lo hacemos. Y en el caso de Chile, tomamos hace algunos años la decisión de hacerlo de manera colaborativa y de manera ordenada. Que es algo fácil de decir, no tan fácil de hacer”, señaló la secretaria de Estado.

Además, la ministra remarcó que “no queremos tecnología a costa de los empleos, a costa de los sueldos, con más brecha, menos digitalización de las personas que tienen menos oportunidades. Lo que queremos es un país que crece, que crece de manera sostenible, que genera mejor empleo y empleo digno”. Esto, según agregó, es parte de los lineamientos éticos que fueron plasmados en proyecto de Ley de Inteligencia Artificial que fue presentado en mayo de este año por el gobierno.

Ante las interrogantes de crear posibles brechas y empleos bajo amenaza, Natalia Lidijover, directora ejecutiva de Futuro del Trabajo de Sofofa Capital Humano, detalla que antes que todo es necesario entender “cómo somos capaces de conocer las habilidades que tenemos cada uno de nosotros y cómo hacemos para tener rutas de formación que nos permitan cada vez tener mejores desafíos y oportunidades ascendentes”.

En adición, añadió que los trabajos mencionados en este estudio tienen tareas con mucho valor por agregar, “y por eso elegimos los públicos que elegimos para partir con este trabajo. Es decir, en dar más y mejores oportunidades de atención a los ciudadanos desde el lugar público, o nuevas soluciones a los problemas sociales que tenemos desde el gobierno. Y las pymes generar de verdad oportunidades de desarrollo para ellos a través de que las personas tengan nuevas oportunidades de tener desafíos y productividad”.

Asimismo, se dio a conocer que Google.org, organización filantrópica asociada al gigante tecnológico, anunció la entrega de un fondo de 750.000 dólares para financiar un ambicioso proyecto que buscará capacitar a más de 65.000 trabajadores en Chile en los próximos dos años. Se buscará capacitar y acercar a los trabajadores del mundo público y privado a estas herramientas que podrán acortar gran parte del tiempo empleado en sus labores.

En estos 40 años, la evolución de la IA no ha sido lineal. En esta largo camino, hoy se ha vuelto “generativa”. Hoy permite la búsqueda semántica, la generación de código, el enrutamiento de correo electrónico, el servicio al cliente y la mejora de la automatización para empresas de todo el mundo.

Esto explica por qué más del 80% de las empresas trabajan con IA generativa o tienen previsto adoptarla durante esta década. Según cifras de la consultora Gartner, se espera que la IA generativa represente 30% del mercado total para 2025.