Con el fin de comprender el constante cambio que está viviendo Chile, la empresa Cadem realizó una nueva versión de la encuesta “El Chile que viene”, que busca conocer cómo las personas de diferentes generaciones miran y viven el mundo, tanto desde sus sueños, anhelos, valores y motivaciones.

Sus mediciones se centran principalmente en qué significa la chilenidad para las personas, con qué se identifican, qué les gusta, y cuáles son sus ritos en las Fiestas Patrias.

A la pregunta: ¿Qué tan cercano o identificado te sientes con estas cosas que son típicamente chilenas?, las Fiestas Patrias ocupan el primer lugar con un 84% de las preferencias (y que se convierte en la mayoría en todos los rangos etarios), seguido de la bandera (82%), y la canción nacional (75%).

Los resultados también arrojaron qué es lo primero que se le viene a la mente a un chileno o chilena, cuando piensa en el país. Las respuestas apuntan principalmente:

  • Empanadas, comida típica.
  • Patriotismo.
  • Paisajes.
  • 18 de septiembre, Fiestas Patrias.

Esto es lo primero que se te viene a la cabeza cuando te preguntan qué es ser chileno

Raúl La Torre, historiador y coordinador de Extensión Cultural de la Universidad de los Andes, señala que la razón del porqué los factores a Fiestas Patrias y la comida es lo que más sigue representando a Chile, es que para la mayoría de sociedad chilena, estas festividades son el gran hito del año, “lo que marca un antes y un después, algo similar a lo que ocurre con la Navidad, el Año Nuevo o los carnavales, en otros países”.

Asimismo, son días esperados por la mayoría de las personas, donde se reviven las tradiciones y afloran los sentimientos patrios, por eso, “no es de extrañar que, acompañada de las Fiestas Patrias se encuentre la comida y en especial la empanada, como factor identitario y vinculados entre ellos” añade La Torre.

Cabe mencionar, que desde el siglo XIX, existió una política de Estado de celebración de las Fiestas Patrias como aniversario del triunfo sobre el imperio español. Esa política continuó intensamente en el siglo XX, pero con el objetivo de construir una nación (unir las identidades diversas a lo largo del país).

Víctor Brangier, historiador y director del Centro de Documentación Patrimonial de la Universidad de Talca, comenta que las celebraciones patrias (oficiales y populares) incluyeron siempre aspectos culinarios tradicionales, generando una síntesis de celebración oficial por arriba y cocina popular por abajo.

Esa mezcla repercutió en el imaginario popular como el mejor momento para “celebrar lo propio”, y que explique la conexión de ciertas tradiciones con lo que se define como Chile, explica Brangier.

Además, históricamente esta temporada era momento en que en que los sectores populares podían celebrar y se generaban las condiciones para aquello. “De hecho, las normas se relajaban un poco, y era el momento en que se autorizaba, se daba permiso justamente para que el pueblo de alguna manera se divirtiera” agrega Jaime Garrido, director de Investigación y Postgrado de la Facultad de Educación, Ciencias Sociales y Humanidades de Universidad de La Frontera.

Fiestas Patrias y comida típica

Otra medición de la encuesta fue la relacionada a cuánto orgullo se siente una persona de diferentes elementos relacionados a Chile.

Lideraron las preferencias la comida chilena (85%), el folklore chileno (83%), ser chileno en general (80%) y la música chilena (79%). A diferencia del ítem de la Selección Chilena, que pasó de 74% de preferencias en 2019, a un 47% en 2023.

Montserrat Copaja, gerente de Estudios Cuantitativos Cadem, señala que las esta parte de la encuesta, fueron las expresiones más concretas y más cercanas para las personas, ya que “la comida en Chile es una forma de expresar también cariño. La gente se reúnen entorno a la comida. De hecho, cuando hablamos con gente que está fuera del país, lo que más extrañan es hacer las empanadas y hacer una asadito”

También, las Fiestas Patrias son un espacio temporal del año, donde todo lo que lo rodea tiene un alto nivel de significación con las personas. “´No hay celebración del 18 sin cueca, chicha y empanada, y efectivamente en esta frase encontramos todo aquello que hace sentir orgullo a los chilenos” explica La Torre.

Además, es una fiesta donde hay un fuerte elemento de unidad. Son días donde nos juntamos en espacios comunes con quienes en el resto del año nos percibimos distintos, con expresiones que compartimos de forma evidente. “Compartimos cierta ritualidad que nos permite volver a los recuerdos, a los juegos, a la música, a los sabores, a la familia, los amigos, a la tierra, etc” añade el historiador la U. de los Andes.

La comida típica se suele valorar en alto grado por los chilenos, “porque es un elemento importante de su sociabilidad” y refuerza los lazos dela comunidad propia, añade el historiador de U. de Talca.

Por ejemplo, el pastel de choclo no se come todos los días, solo en ocasiones especiales cuando se reúne la familia extendida. El asado no se come solo, sino con amistades, vecinos y familia. Lo mismo ocurre con las empanada, anticuchos y otros ejemplos de ”comida típica”.

¿Patriotismo?

Las Fiestas Patrias son una suma de manifestaciones asociadas a la identidad nacional que despiertan eso que se llama “patriotismo”.

La gastronomía, el folclore, la música, la geografía y sus diferentes expresiones, los colores de la bandera, entre tantos otros elementos, están muy presentes en los días de celebración, “y creo yo, es uno de los motivos por lo cual esta fiesta no pierde importancia y sigue sumándole ingredientes contemporáneos a las tradiciones que vienen de antaño, sin quitarle su esencia” señala el historiador de U. de los Andes.

Si se considera el patriotismo como el amor por el terruño propio y su gente: sí, el patriotismo en Chile es fuerte. No así la idea de nación (comunidad imaginada de gente que no se conoce entre sí), explica Brangier.

Históricamente, de acuerdo al historiador U. Talca, las personas han sentido un vínculo más fuerte por la tierra donde nacieron que por Chile. Las personas valoran esta festividad porque estas incluyen elementos del territorio propio y local.

La bandera o el himno nacional, por el contrario, son símbolos de la nación abstracta (gente de Chile que no se conoce entre sí), por lo tanto, son elementos menos valorados.

El mejor país para vivir

Cadem también analizó diferentes tipos de afirmaciones que se hacen sobre el país, y en el caso de: “Chile es el mejor país para vivir dentro de América Latina” un 81% está de acuerdo, incluso el segmento de 18-34 años es el más de acuerdo con un 85%, mientras que el segmento 55+ sólo con un 76%.

“Aquí hay una clara diferencia marcada por la edad y las expectativas de país” enfatiza La Torre. Hay un rango etario que encuentra en Chile ciertas comodidades que le permiten tener un estilo de vida que son difíciles de tener en otros países de nuestra región.

El acceso a la información y claramente la globalización, hacen que la relación con personas nacidas en otros países permita un intercambio de experiencias donde se reafirme esta idea. “No obstante, aquello no deja de lado una constante y aguda crítica en tono de queja, que muestra una expectativa de vida que no se encuentra dentro de nuestra región” añade.

Por lo general, según Brangier, el segmento 55+ ha viajado fuera de Chile más en promedio que el segmento 18-34, por lo tanto, tienen más elementos de comparación para dudar que Chile sea mejor que América Latina.

Por otro lado, el segmento 18-34 accede a una visión de América Latina sobre todo a través de estereotipos de RRSS que suelen degradar a esos países.

¿Cuál es el hecho histórico más importante?

El hecho histórico más importante de la Historia de Chile según la encuesta son:

-Proclamación de la independencia de Chile (33%)

-Golpe Militar de 1973 (31%)

-Guerra del Pacífico (17%)

Que la proclamación de independencia lidere la encuesta, se puede entender desde el punto de vista del espacio de construcción del país, pero también, “se asocia mucho a la celebración” señala el director de investigación de la UFRO.

En cuanto al Golpe Militar de 1973, que esté entre los hechos más importantes de la historia, se puede comprender por el contexto actual de conmemoración de los 50 años de ese hito, o que “puede ser absolutamente un un hecho importante y significativo desde el punto de vista que marca una manera de entender en la cual El País no debiera transitar nunca más. Pero existen muchos más puntos de vista para explicar este hito” comenta Garrido.

“La percepción de importancia no creo que vaya asociada a una valoración positiva del hecho ni al conocimiento certero de sus consecuencias. Sí creo que existe una mayor conciencia y valoración por hechos históricos recientes, y me refiero a los acontecidos en la segunda mitad del siglo XX” señala La Torre.

“Por supuesto hubo otros hechos muy significativos en la historia republicana de Chile que cambiaron para siempre el quehacer del país (la batalla de Lircay de 1830, la fundación de la Universidad de Chile en 1843, el plebiscito de 1988 o los estallidos sociales de 2011 y 2019), pero como no se celebran conmemoraciones oficiales, no tienen tanto peso en el imaginario colectivo”, concluye Brangier.