Para responder esta interrogante, primero hay que partir del hecho de que las mujeres trans sí forman parte del feminismo. Considero errónea y simplista la interpretación que realizan muchas mujeres al considerar que las mujeres trans, por el hecho de contar con una corporalidad biológica distinta, no son mujeres. La violencia y discriminación que sufrimos las mujeres se da independiente de la orientación sexual e identidad de género, ya que en general, el machismo y la cultura patriarcal ataca a todas las mujeres. Las mujeres trans podemos marchar y participar de espacios separatistas.

En el último tiempo las mujeres trans hemos tenido que luchar por el derecho a nuestra identidad en el proyecto de Ley de Identidad de Género. Por cierto que las demandas y luchas no se acaban ahí, ya que como mujeres también sufrimos distintos problemas de violencia, discriminación y precarización laboral. Es útil recordar que actualmente 90-95% de las mujeres trans ejercen el trabajo sexual porque no existe ninguna garantía del respeto a la identidad y de no discriminación en los espacios laborales, tanto públicos como privados.

Asimismo, tampoco el gobierno tiene ninguna política pública en el caso de la violencia y crímenes de odio cometidos en contra de mujeres trans. El Ministerio de la Mujer y Equidad de género y Fiscalía Nacional, no se preocupan por la violencia cometida en contra de mujeres lesbianas, bisexuales y trans. Así también, actualmente, el delito de femicidio excluye a las mujeres trans en el caso que no cuenten con su identidad registral. Son tantas las particularidades que sufrimos las mujeres trans, así como las que sufren las mujeres lesbianas, bisexuales, mujeres pobladoras, mujeres trabajadoras, mujeres de pueblos originarios, etc.

En este entendido, las mujeres trans sufrimos ciertas particularidades en torno a la misma discriminación, violencia, acoso y hostigamiento que sufren las mujeres en la actualidad. En esta linea, no es una discusión ni debate sobre quién sufre más y sobre quién lo pasa peor, sino que como solucionamos las particularidades que sufrimos los distintos tipos de mujeres en la sociedad.

Cada mujer aporta una mirada y debate distinto en torno al movimiento feminista. Yo considero que las mujeres trans aportamos un granito de arena en torno a la discusión sobre cómo la sociedad machista y misógina ataca a las mujeres trans y especialmente en torno a la desbiologización de lo que entendemos por mujeres. Ahora sabemos que no todas las mujeres tienen vaginas y que existen distintos tipos de cuerpos y cada uno sufre estigmas y prejuicios de una manera especial. Este 8 de marzo, las mujeres trans también somos protagonistas y también estaremos ahí en las calles, marchando, participando en espacios de la huelga, formando parte de esta gran y sorora comunidad de mujeres.

* Constanza Valdés Contreras, activista trans, feminista y consultora derechos LGBTIQ.