La rinitis alérgica es una manifestación de una reacción alérgica, dada habitualmente por alérgenos inhalatorios como el polvo de habitación, polen, caspa de perro o pelos de gato, árboles, pasto, incluso algunos alimentos.
Se caracteriza por la congestión nasal, rinorrea, descarga posterior, estornudos y prurito nasal. Puede ser dependiendo del desencadenante estacional o perenne (todo el año).
Los antihistamínicos funcionan inhibiendo la liberación de histamina, que es uno de los mediadores más potentes que nos produce la alergia. Con eso se logra disminuir síntomas como el prurito nasal, estornudos y en menor medida la congestión nasal.
* Otorrinolaringólogo de la Clínica Santa María.