Santiago se acerca a los 40°C: 2010-2019 cierra como la década más cálida y seca de la historia

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En enero de 2019, la capital registró 38°C y expertos proyectan que pronto Santiago podría superar los 40°C. La marca es parte de las cifras récords que hicieron de la última década la más calurosa y seca en Santiago y la zona centro-sur desde que hay registros.


En el año 1950, Santiago registró solo 24 días con temperaturas sobre los 30°C. En 2019 se anotaron 86 días con temperaturas sobre los 30°C. Durante 2019, la estación de Quinta Normal, en Santiago, solo registró 82 mm de lluvia, lo que convirtió al año que recién terminó en el más secos de los últimos 50 años.

Ambos registros ayudaron a cimentar al promedio de los últimos 10 años como los más secos y calurosos desde que hay registros. Según el estudio "2010-2019, la década más cálida y seca", elaborado por el grupo @AntarcticaCL de la Universidad de Santiago, la última década fue la más cálida registrada para las zonas centro y centro-sur. En buena parte de Chile, el promedio de la temperatura en este período fue mucho más alto que el promedio de temperatura de la segunda mitad del siglo XX.

La investigación señala que el alza de la temperatura experimentado en algunos puntos de la zona centro-sur se estima cercano a 1°C. Las zonas centro y centro-sur fueron las que experimentaron mayor alza de temperatura, mientras que la Patagonia fue la zona de menor calentamiento relativo en el mismo período.

Raúl Cordero, líder del estudio, dice que 2010-2019 es la década más cálida en prácticamente todo el país, pero es la más seca particularmente en la zona central. "Cada vez que cambia en algo el promedio, las probabilidades de ocurrencia de valores extremos se disparan. Por eso cuando dicen que el calentamiento global representa unas pocas décimas de grados, estas pocas décimas usualmente enmascaran grandes cambios en la frecuencia con la que se presentan valores extremos. Cambió pocas décimas de grados el promedio de temperatura en la zona central, pero la ocurrencia de temperaturas extremas", dice.

Además, el estudio precisa que la última década fue la más cálida registrada en Santiago. La temperatura máxima promedio en la última década alcanzó en Santiago los 23,7°C, valor superior a la temperatura máxima promedio de la década de 1950 (22°C), por ejemplo. La última década completa una sucesión de cinco décadas en las que la temperatura máxima promedio ha sido más alta que la correspondiente a la década previa.

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Las zonas centro y centro-sur fueron las que experimentaron mayor alza de temperatura en el país.[/caption]

Termómetros al alza

El año 2019 cerró también como el más cálido en Santiago, con un promedio de temperaturas máximas de 24,3°C, superando a 2015. En términos de temperatura máxima, los diez años más cálidos en Santiago se han registrado todos desde 2003.

La temporada 2016-17 marcó el récord como el verano más cálido registrado jamás en Chile. La temperatura máxima promedio en los meses enero-febrero en 2017 fue superior a 32°C; esto es más de 1°C más que la temperatura máxima promedio en los mismos meses de 2019, año que se posiciona en el segundo lugar para el mismo período.

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Promedios de temperaturas máximas por década en Santiago.[/caption]

Otro dato que arroja la investigación de la Usach es que la temperatura máxima promedio en los meses enero-febrero durante la última década fue de 30,5°C, casi 1°C más que la temperatura máxima promedio en los mismos meses de los años 50 del siglo XX (29,5°C).

"En pocas décadas podríamos observar en Santiago 40°C, situación que hasta hace poco era inimaginable hace un par de décadas nada más. Nunca jamás desde que existe el hombre, ha habido temperaturas más altas promedio como las de ahora", dice el académico de la Usach.

En esta última década, también aumentó el número de días con temperaturas extremas. Se registraron casi tres días por año con temperaturas máximas superiores a los 35°C (en décadas previas se registraban en promedio menos de tres días). En la última década, hubo más de 70 días por año con temperaturas máximas superiores a los 30°C, esto representa un alza de alrededor de 75% respecto a valores registrados en las décadas de la segunda mitad del siglo XX (algo más de 40 días por año).

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Gráfico muestra el alza de las temperaturas máximas en Santiago.[/caption]

"Ningún humano ha vivido jamás en un planeta tan cálido como el actual, ninguno humano ha respirado un aire como el de la atmósfera actual. Pero más allá de que esta es para la zona central la peor década desde que Chile existe, solamente hace 200 años. Pero las peores décadas están aún por venir, porque la temperatura va a seguir subiendo y probablemente la tendencia a la baja en las precipitaciones se mantenga. En temperatura será peor sin ninguna duda, en precipitaciones en el peor de los casos creo que no será peor", añade Cordero.

En esta década Santiago superó por primera vez los 38°C en enero 2019. En el top 6 de temperaturas máximas registradas en Santiago, cinco ocurrieron durante la última década.

Precipitaciones: La década más seca

El estudio no solamente se refiere a temperaturas extremas, sino que también a la sequía y falta de precipitaciones que afecta severamente al país. Señala que la última década fue la más seca registrada para las zonas centro y centro-sur.

En relación a lo ocurrido a mediados del siglo XX, la baja en precipitaciones experimentada en algunos puntos de la zona centro y centro-sur alcanzó el 30%. Mientras las zonas centro y centro-sur fueron las que experimentaron mayor baja en las precipitaciones, parte de la Patagonia experimentó un importante alza relativa en sus precipitaciones durante la última década.

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Expertos anticipan cómo será el verano 2020 en Chile

Cordero señala que uno de los problemas del cambio climático, "es que hace anómalas las tendencias, significa que provoca cambios en las precipitaciones en distintas partes del mundo. Hay zonas que se están secando, pasa en la zona central, y otras donde no pasa eso, aumentan las precipitaciones".

Las precipitaciones promedio en la última década alcanzaron en Santiago algo menos de 200 mm por año. Los promedios anuales de décadas previas superaban los 300 mm. 

La última década registró años extremadamente secos como 2011, 2018 y particularmente el 2019, este último con solo 82 mm de precipitaciones, convirtiéndose en el segundo más seco desde que existe registro en Santiago. Solo es superado por 1968, que anotó 69.

"Esta década es muy seca, pero no necesariamente la próxima será más seca aún. Lo que vivimos ahora fue tan seca, además de la baja de las precipitaciones producto del cambio climático, se superpone con el efecto de la sequía. Estas en general son eventos extremos naturales, el cambio climático no. Esta década estuvo marcada por una superposición de efectos negativos, por un lado, el cambio climático y por otro, una sequía", explica Cordero.

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La baja de precipitaciones registrada en Santiago durante la última década está marcada por una importante disminución de lluvias (entre 40-50%) durante los meses de junio y julio. El estudio señala que ni la fase positiva de la oscilación de El Niño registrada en 2010, 2016, 2017 y 2019, pudo cortar la racha negativa de diez años.

"Como la mayoría de la población chilena habita en la zona central, el que justo nos haya tocado a nosotros una baja tan agresiva en las precipitaciones es preocupante. Hasta mediados de siglo vamos a tener una continua alza en las temperaturas, en precipitaciones el pronóstico es menos claro, sin embargo, nosotros coincidimos con la mayoría que indica que el pronóstico debería disminuir las precipitaciones en la zona central hasta un 20% hasta mediados de este siglo. Esa disminución es con respecto a los valores meteorológicos, incluye la influencia de la sequía actual", añade Cordero.

En la última década cayeron a su mínimo histórico el número de días con precipitaciones relevantes. En la última década, Santiago registró menos de tres días por año con lluvias superiores a los 20 mm. En década previas eran al menos cuatro días por año. 

En la última década, se registraron en Santiago sólo dos días con lluvias superiores a los 45 mm, lo que representa una disminución de 75% respecto a la segunda mitad del siglo XX, que anotaba casi ochos días por década con lluvias superiores a 45 mm.

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