El protagonismo logrado por las vacunas, todo gracias a la epidemia de Covid-19, ha hecho que se ponga mucha más atención a procesos como la campaña de vacunación contra la influenza, proceso actualmente en curso en Chile.
La influenza o gripe estacional, como su nombre lo dice es un virus presente en la estación de otoño y principalmente en la temporada de invierno, y gracias a las vacunas que cada año están disponibles se puede proteger a la mayor cantidad de personas posible contra esta enfermedad potencialmente grave, o incluso mortal.
Los síntomas de la influenza tiene un período de incubación medio más corto (el tiempo desde la infección hasta la aparición de los síntomas) y un intervalo de serie más corto (el tiempo entre casos sucesivos) que el virus Covid-19. El intervalo estimado para el coronavirus es de 5 a 6 días, mientras que para el virus de la influenza, es de 3 días. Eso significa que la influenza se puede propagar más rápido que el Covid-19.
1. Grupos objetivos
La actividad máxima de la influenza en el hemisferio sur puede variar de una temporada a otra, pero generalmente ocurre entre junio y septiembre. Las medidas de salud pública para prevenir la propagación del Sars-CoV-2, que causa el Covid-19, ayudaron en 2020 a reducir la transmisión, pero el riesgo de influenza no ha disminuido,
Los grupos prioritario en este caso, dice el doctor Michel Serri, infectólogo de Clínica RedSalud Vitacura, son las personas mayores de 65 años. También está orientada para embarazadas desde el primer mes de gestación y las personas con enfermedades crónicas. Las indicaciones para mujeres embarazadas, dice Serri, es que deben vacunarse desde el primer mes de gestación.
María Luz Endeiza, infectóloga pediátrica y jefa del Vacunatorio de Clínica Universidad de los Andes, explica que las embarazadas son un grupo conocido de alto riesgo de complicaciones severas por Influenza, por lo que es muy importante que estén vacunadas. “Influenza en el embarazo se relaciona con aumento de hospitalizaciones, neumonía grave, aborto espontáneo, parto prematuro y bajo peso al nacer”, aclara.
Otros grupos prioritarios dice Endeiza son, enfermos crónicos entre 11 y 64 años portadores de alguna de las siguientes condiciones de riesgo: enfermedades metabólicas, entre ellas diabetes, enfermedades pulmonares crónicas: asma bronquial, EPOC, fibrosis quística, fibrosis - pulmonar de cualquier causa; cardiopatías: congénitas, reumática, isquémica y miocardiopatías de cualquier causa; enfermedades neuromusculares congénitas o adquiridas que determinan trastornos de la deglución o del manejo de secreciones respiratorias; hipertensión arterial en tratamiento farmacológico; obesidad mórbida; insuficiencia renal en etapa 4 o mayor, en diálisis; nsuficiencia hepática crónica; enfermedades autoinmunes: Lupus, escleroderma, artritis reumatoide, enfermedad de Crohn, etc.; cáncer en tratamiento con radioterapia, quimioterapia, terapias hormonales o medidas paliativas de cualquier tipo; infección por VI; inmunodeficiencias congénitas o adquiridas
2. ¿Se pueden inocular los niños?
Según el doctor en Microbiología de la Universidad Mayor, Sebastián Reyes, los niños sí están considerados como prioritarios en el plan de vacunación del Ministerio desde los 6 meses hasta los 10 años.
Los niños son importantes impulsores de la transmisión del virus de la influenza a diferencia de lo que ocurre con Covid-19, en que ese grupo se ve menos afectados que los adultos.
3. ¿Qué pasa si no estoy en el grupo objetivo?
En el caso de niños mayores a 10 años, explica el doctor Reyes, además de los adultos no incluidos en el plan de vacunación, pueden vacunarse de manera particular.
4. ¿Se puede colocar entre la primera y la segunda dosis de la vacuna del Covid-19?
Sí, la única indicación, indica Reyes, es que entre vacunas existan dos semanas de diferencia, “por tanto se puede colocar la primera dosis de la vacuna contra Covid-19, luego esperar dos semanas para colocar la de la influenza y luego dos semanas para la segunda dosis de la vacuna contra Covid-19″.
Serri señala que actualmente no existen estudios que indiquen que al administrar la vacuna de la influenza junto con la del Covid-19 pudiese ocurrir algún tipo de interacción que afecte la eficacia de cualquiera de las dos vacunas. Por lo tanto, la recomendación es colocar con dos semanas de diferencia la vacuna de la influenza versus la del Covid-19.
“Siempre hay que priorizar vacuna Covid-19. Si ya le está por tocar, por calendario MINSAL, esperar la vacuna Covid-19 y poner Influenza a los 14 días”, explica Endeiza.
5. ¿Se puede sentir algún tipo de molestias?
Se pueden experimentar algunos síntomas locales y generales que aparecen dentro de las 48 horas posteriores a la vacunación, explica Reyes. Entre los síntomas generales se encuentran irritabilidad, malestar general y fiebre, somnolencia, llanto en los niños, dolor muscular y articular. “Todos estos síntomas pueden ser de intensidad leve a moderada”, aclara.
En general las molestias son bastante leves, explica Serri, y van desde dolor en el sitio de la punción, un poco de malestar general similar a sentirse agripado que no dura más de 24 a 48 horas, “por lo que se aconseja tomar paracetamol”. La gran mayoría de las veces, las molestias son leves e inespecíficas y no duran más de un día, como máximo dos.
Entre los efectos adversos graves que pueden aparecer excepcionalmente, acota Reyes, están la fiebre alta (de 40º y más), convulsiones, alergias severas e incluso shock anafiláctico. “Estos efectos adversos graves aparecen en personas que tienen alergia al huevo y se deben a que tanto la vacuna de la influenza es producida en huevos”.
6. ¿Es mejor o más recomendable vacurnarse contra el Covid-19 que contra la influenza?
Reyes es enfático en señalar que “es súper importante vacunarse contra los dos virus”. Hay un sobrecargo del sistema de salud y tener otra causa que llene las salas de urgencia, generará un colpaso. “Protegernos contra la influenza es evitar que nos enfermemos gravemente y que necesitemos atención médica mayor”.
7. ¿Protege contra Covid-19?
Las vacunas son específicas. Tal cómo Reyes explica, “cada vacuna es como un paquete separado de inmunidad, que entrega protección enfocada a cada infección”. En este caso, una vacuna protege contra la influenza y la otra vacuna, protege contra el Sars-CoV-2.
8. ¿Se puede contraer Covid-19 e influenza al mismo tiempo?
El año pasado se vieron algunos casos de Covid-19 con otras enfermedades respiratorias y el paciente puede tener consecuencias más graves en términos de síntomas, riesgos de hospitalización y muerte. “Hay que tener mucho cuidado, porque como la sintomatología es muy parecida, si la persona recibe un diagnóstico para una de las enfermedades, no excluye la posibilidad de tener la otra”, dice Reyes.
Además, en invierno circulan varios virus respiratorios, tales como la Influenza, el virus respiratorio sincicial, adenovirus, metaneumovirus, entre otros, y todos tienen una sintomatología muy parecida.
9. ¿Cuánto demora en desarrollar inmunidad?
La mejor protección contra la influenza es la vacunación y la mayoría de las personas desarrollan inmunidad dentro de las dos semanas de recibir la inyección. La actual evidencia sugiere que la protección óptima ocurre en los 3 a 4 meses posteriores a la inoculación, y los expertos recomiendan ponersela a partir de mediados de abril y mayo. Sin embargo, nunca es demasiado tarde para hacerlo.
10. ¿Qué personas no deberían vacunarse contra la influenza?
No es recomendable para todas aquellas personas que tengan conocimiento de alergia al huevo o a cualquier componente de la vacuna, “no la debieran usar”, advierte Reyes.
La vacuna está contraindicada, dice Serri, en aquellas personas que hayan tenido reacciones alérgicas severas a la vacuna contra la Influenza previa o que tengan alergia a alguno de sus componentes. Además, en general, “no se recomienda en personas con inmunodeficiencia muy importante, puesto que la eficacia de la vacuna en este grupo puede ser menor y la persona puede sentir una falsa seguridad de vacunación”, aclara.