El carfentanilo o carfentanil es un analgésico opioide usado en veterinaria para anestesiar animales de gran tamaño, como elefantes y osos, a través de dardos tranquilizantes. Sin embargo, en ocasiones también se usado en humanos, para imágenes médicas de receptores opioides, y también como droga ilícita, consumida por inyección, insuflación o inhalación.

Por ello los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU. advierten un aumento en el uso de esta droga en ese país.

Sólo en EE.UU., durante 2023, casi el 70% de todas las muertes por sobredosis en ese país se debieron a fentanilos fabricados ilegalmente (FMI, por su sigla en inglés). Y uno de los principales fue el carfentanilo, una versión alterada del fentanilo que se estima que es 100 veces más potente, según un informe de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés) en una alerta del 5 de diciembre.

Se parece a la cocaína y es 100 veces más potente que el fentanilo: alertan de nueva y letal droga

Las muertes por carfentanilo aumentaron más del 700% en el último año, según la misma fuente: hubo 29 sobredosis mortales entre enero y junio de 2023, y 238 en ese mismo período en 2024.

Estos datos provienen del Sistema Estatal de Informes de Sobredosis No Intencionales de Drogas (SUDORS) de los CDC, pero las cifras en realidad podrían ser más altas, ya que los datos de 2024 son preliminares y no se han reportado todas las muertes por sobredosis, señaló la agencia.

Desde un brote de muertes relacionadas con el carfentanilo en 2016 y 2016, la droga había “desaparecido en gran medida” hasta este reciente resurgimiento, señaló los CDC.

Ante el aumento de sobredosis letales, los CDC piden una “vigilancia rigurosa” del carfentanilo y otros opioides más potentes que el fentanilo.

La potencia del carfentanilo y la posibilidad de mezclarlo con otras drogas, como las benzodiazepinas, la cocaína y los opioides, lo hacen especialmente mortal. Muchos usuarios no saben que están consumiendo carfentanilo, lo que refleja la forma en que el fentanilo se introdujo inicialmente como adulterante de la heroína. Esta falta de conocimiento aumenta la probabilidad de sobredosis accidentales.

Chris Tuell, profesor adjunto de psiquiatría y neurociencia conductual en la Facultad de Medicina de la Universidad de Cincinnati y director clínico de servicios de adicción en el Centro Lindner de HOPE de UC Health, dijo a Fox News Digital que la “alta rentabilidad” del carfentanilo probablemente impulsa su prevalencia.

“Cantidades muy pequeñas pueden producir miles de dosis”, agregó.

“Los opioides sintéticos como el carfentanilo son relativamente fáciles de fabricar en laboratorios ilegales”, continuó Tuell. “Como la droga es sintética, es más fácil de producir, a diferencia de la heroína, que depende de una planta como el opio”.

Foto: Reuters

¿Por qué es tan peligroso el carfentanilo?

El carfentanilo es 10.000 veces más potente que la morfina y 100 veces más potente que el fentanilo, confirmó Tuell. “Incluso una pequeña cantidad puede ser mortal, ya que puede causar insuficiencia respiratoria“, explicó.

Una de las principales preocupaciones con el carfentanilo y el fentanilo es que con frecuencia se mezclan con otras drogas, como benzodiazepinas, cocaína y opioides, lo que puede provocar sobredosis accidentales, según Tuell. “El carfentanilo también puede parecerse a la cocaína y a la heroína, por lo que se mezcla perfectamente con otras drogas”, advirtió.

“Incluso una pequeña cantidad puede aumentar la potencia de una mezcla de drogas, produciendo un efecto más fuerte y duradero”.

El carfentanilo suele resultar atractivo para los consumidores de drogas que tienen una alta tolerancia a los opioides porque buscan una sustancia más fuerte, “lo que hace que la droga sea atractiva a pesar del riesgo”, señaló Tuell.

Sólo se necesitan 2 miligramos para tranquilizar a un elefante; esa misma cantidad es lo suficientemente potente como para matar a 50 personas, según un informe del Departamento de Asuntos de Veteranos de EE.UU.

El carfentanilo se puede inyectar y suele mezclarse con otros opioides o heroína, y también se puede inhalar si está en forma de polvo.

“Inhalar la droga puede ser muy riesgoso porque puede entrar en el torrente sanguíneo y provocar una sobredosis”, advirtió Tuell. “Esto puede ocurrir de forma intencionada o accidental, ya que la droga puede transmitirse fácilmente por el aire”.

El carfentanilo a veces puede presentarse en forma de “pastillas prensadas” que se parecen a los medicamentos recetados. “Los niños son ahora la generación de la inteligencia artificial y los deepfakes, ya que las drogas ilícitas se hacen pasar por medicamentos recetados comunes”, advirtió Tuell.

Los CDC pidieron esfuerzos específicos para prevenir muertes por fentanilos fabricados ilegalmente, “como mantener y mejorar la distribución de herramientas de reducción de riesgos, aumentar el acceso y la retención del tratamiento para trastornos por uso de sustancias y prevenir el inicio del consumo de drogas”.