¿Sirven los rayos gamma para tratar tumores cerebrales?
Más de 1.000.000 de pacientes han sido tratados con esta técnica en el mundo. Sepa de qué se trata y en que casos puede ser útil.
Los rayos gamma llegaron para facilitar la vida del paciente que debe someterse a una cirugía cerebral convencional. No requiere incisión, disminuye los costos por procedimiento, no requiere anestesia general, excepto en casos especiales y niños, y tiene una casi nula interrupción en el quehacer cotidiano y laboral de la persona, ya que puede comenzar a hacer su vida normal al día siguiente del tratamiento.
¿Sirven estos rayos gamma para tratar tumores cerebrales? Tumores cerebrales benignos son bastante frecuentes. Estos crecen en forma lenta y no contienen células cancerosas, y dentro de los más comunes se encuentran el Meningioma y el Schwannoma Vestibular tumores que hoy son posibles de tratar de manera ambulatoria gracias a la técnica de los rayos gamma.
Cuando una célula recibe un impacto de radiación, el ADN del núcleo se altera radicalmente de tal manera que la célula no es capaz de duplicarlo y al no ser capaz de duplicarlo, no se puede multiplicar deteniendo así su crecimiento producto del daño que la radiación ocasionó en el ADN. Este es el primer mecanismo de acción sobre el tumor. Así, la radiocirugía daña el material genético (ADN) en las células del tumor y estas pierden su capacidad de reproducirse y se detiene su crecimiento.
El segundo mecanismo es a través del efecto de la radiación sobre los vasos sanguíneos del tumor. Los tumores, como cualquier órgano, necesitan para vivir aportes en nutrientes como oxígeno y glucosa y este aporte llega a través de los vasos sanguíneos. Cuando se utiliza la técnica de los rayos gamma para atacar al tumor, este comienza un proceso de trombosis, los vasos sanguíneos se van tapando en el tiempo y en la medida en que se van tapando se produce la muerte de las células a las cuales aportaban la sangre y eso significa que el tumor puede incluso reducir su tamaño.
Con esta técnica se tiene alrededor de un 95% de control tumoral en caso de los Meningiomas y de 97% en los Schwannomas y no se tiene las complicaciones ni los peligros que conlleva una cirugía abierta. Por ejemplo, en el caso de los Schwannomas Vestibulares (neurinoma acústico) los pacientes sometidos a cirugía se arriesgan a desarrollar parálisis facial y/o pérdida auditiva completa, entro otros riesgos que implica esa cirugía.
Así, en el mundo son más de 1.000.000 de pacientes los que han sido tratados con esta técnica, sin que se hayan reportado casos de mortalidad debido al procedimiento y respaldado por cinco décadas de experiencia clínica. Los procedimientos continúan creciendo y sus múltiples beneficios, por ser un procedimiento no invasivo, han contribuido a que la radiocirugía sea el tratamiento de elección primario o complementario a cirugía, cuando hay patologías intracraneales como tumores cerebrales benignos, susceptibles de ser tratadas con radiocirugía.
* Neurocirujano y Director Médico del Centro Gamma Knife.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.