El 7 de agosto, el gobierno abrió un proceso extraordinario antes Las Naciones Unidas (ONU), para acreditar a las organizaciones no gubernamentales chilenas que nunca antes han participado de una cumbre climática internacional, a fin de que puedan ingresar a la Conferencia de las Partes, más conocida como COP25, que se realizará en Santiago entre el 2 y el 13 de diciembre.
En el país, solo FIMA tiene el estatus de ONG "observadora" desde 2014 ante ONU Cambio Climático (UNFCCC por sus siglas en inglés). Es decir, puede ingresar a los pabellones de las delegaciones diplomáticas de los 196 países que participan de las COP e, incluso, estar presentes en algunas de las mesas de negociaciones. Esta área es conocida como "blue zone" (zona azul) y su manejo es de potestad exclusiva de la ONU.
Otras organizaciones nacionales como Terram habían asistido a otras cumbres climáticas de la ONU, pero como parte de la delegación oficial del país.
No obstante, la gran demanda de organizaciones chilenas que quieren ser parte de la Conferencia durante este año, obligó al gobierno a negociar con la ONU para abrir un proceso extraordinario.
Flavia Liberona, de la Fundación Terram, explica que "varias ONG que antes habíamos participado de las COP como miembros de la delegación oficial del gobierno, comenzamos a preguntar cómo lo haríamos esta vez. Me imagino que para facilitar la participación de la gran cantidad de organizaciones chilenas interesadas en estar en la blue zone, llevó al gobierno a abrir esta convocatoria".
Liberona agrega, además, que "el gobierno ha dicho que quiere que ésta sea una COP ciudadana, por lo que es coherente que haga este esfuerzo para incluir a la sociedad civil del país adentro de la cumbre".
Si bien, las organizaciones nacionales valoran esta iniciativa del gobierno, indican que el proceso es algo "engorroso" y aún no está claro cómo se entregarán las acreditaciones. Además, a algunos les llama la atención que el formulario de postulación se entregue a través del popular software "surveymonkey" y no a través de la página oficial.
ONG observadora
El anuncio de que Chile sería sede de la COP25 se realizó en diciembre pasado, después de que el organismo internacional cerrara las postulaciones oficiales, el 31 de agosto del año pasado. Eso impidió que las ONG nacionales entraran al proceso de admisión ante la ONU.
Según ONU Cambio Climático, la acreditación oficial de una organización podría tomar un año o más.
El llamado del equipo organizador de la COP25 en Chile a las ONG nacionales se realizó la semana pasada y se ha difundido a través de redes sociales. Este lleva un link a la página de ONU Cambio Climático (UNFCCC) donde se explica a grandes rasgos el proceso de acreditación.
"Los representantes de su organización tiene la opción de ser nominado y confirmado para asistir a las sesiones a través de una organización que ya se encuentra admitida, que acepta incluir a sus observadores (ONGs chilenas) en sus delegaciones", dice la web de la UNFCCC.
Agrega que "el Secretariado (de la UNFCCC), con el apoyo del Gobierno de Chile y los observadores ya admitidos de las comunidades con focos similares, ayudarán a identificar las ONGs chilenas a las que pueden darle apoyo para su participación exclusivamente para la COP25".
Es decir, los representantes de las organizaciones nacionales podrán asistir a la COP25 con cupos de otras entidades que ya poseen el estatus de "observadoras", pero deben pasar un proceso de admisión previo en el que el gobierno tendrá participación.
Entre las entidades locales hay tranquilidad. "Existe un concepto de solidaridad entre las organizaciones a nivel global por lo que me parece que las ONG que no puedan venir por algún motivo estarían dispuesta a entregar sus cupos a otras o disponerlos en una especie de fondo", dice Ezio Costa director de Fima.
La anticipación de las ONG
"Participar activamente de la cumbre es un anhelo y una solicitud que las organizaciones vienen haciendo desde que supimos que la COP25 sería en Chile", afirma Costa.
Es por esto que desde hace meses algunas ONG sin el estatus de "observadoras", comenzaron a hacer gestiones con otras instituciones que sí lo tienen, para conseguir cupos.
Así lo hizo Fundación Terram, que se contactó con la Red de Acción Climática (CAN), que es una agrupación internacional que reúne a diversas organizaciones no gubernamentales, para conseguir cupos.
La Fundación Cultiva, por su parte, ya se inscribió en este proceso extraordinario. "Estamos postulando a través de la plataforma que se abrió en la web de la COP25, para tener presencia en las zonas azul y verde, como gestores y socios de la campaña #6D, proyecto global patrocinado por el Ministerio de Medio Ambiente y COP, entre otras instituciones", explica Jorge Tapia, director de la campaña por la acción climática global #6D.
No obstante, previamente Cultiva había tomado contacto con Youngo, que es una agrupación oficial de la UNFCCC que reúne organizaciones e individuos jóvenes que trabajan por la acción climática para buscar la forma de estar dentro de la 'blue zone'. Según afirma Tapia, esperan lograr cuatro cupos.
Otras organizaciones no gubernamentales internacionales, como WWF, Oceana y Greenpeace, que cuentan con oficinas en el país, tienen cupos asegurados.
Según informan desde ONU Cambio Climático, "este proceso es sólo para ONG chilenas y sólo para la COP25".
Durante esta tarde, el equipo organizador de la COP25 difundió un documento al respecto, indicando que ONU Cambio Climático "a petición de la Presidencia de Chile, ha abierto un proceso especial de acreditación exclusivamente para la COP25" para ONG chilenas. "Lo anterior considerando que el gobierno de Chile valora la participación de actores no estatales y que recibió la Presidencia de la COP25 una vez vencidos los plazos formales de acreditación".
Asimismo, agrega que "las conferencias que tendrán lugar en la 'Zona Azul' no estarán abiertas al público general, sino sólo para aquellas organizaciones que estén previamente acreditadas por la CMNUCC".
*Este texto fue modificado a las 17:28