¿Cuál es la cantidad ideal de comidas típicas de invierno para consumir sin sufrir consecuencias negativas? Es una pregunta típica en días de frío y de lluvias, sobre todo en regiones más centralizadas.
Aunque tradicionalmente se piensa que en invierno necesitamos más ingesta de calorías, esto no es verdad, ya que no estamos en contacto tan directo con el frío. Sin embargo, nuestras preparaciones típicas, varían de estación en estación, principalmente en el centro de Chile donde predomina el clima mediterráneo, con un verano seco y un invierno más lluvioso, realidad que predomina menos en el sur del país, donde las lluvias parten en marzo, lo que entrega alimentos diferentes según la temporada.
Soy nutricionista y estos son los mejores 8 platos para combatir el frío sin subir de peso
Pero, a pesar de que no hay recomendaciones en nuestras Guías Alimentarias para Chile, del Ministerio de Salud sobre algunas preparaciones específicas, sí podemos realizar algunas recomendaciones generales durante los meses de lluvia, en los cuales podemos incorporar diariamente al menos una de las siguientes preparaciones de nuestros platos tradicionales chilenos como:
1. Cazuelas de vacuno.
2. Cazuelas de ave o pava (dependiendo de la región).
3. Carbonadas.
4. Valdiviano.
5. Ajiaco.
6. Pantrucas.
7. Caldillos de diferentes pescados.
8. Legumbres.
Estas comidas no solo aportan sabores de la infancia, si no también incorpora alimentos como verduras, papas, cereales y una cantidad moderada de aves y carnes, todos ingredientes presentes en nuestro país y que favorece la compra de alimentos locales.
Por otra parte, muchos de ellos contienen bastante líquido, por lo que ayudan a la hidratación durante el invierno.
Incorporar estos platos de forma diaria, no solo mantendrá una equilibrada alimentación, sino que será de menor costo, ya que contienen alimentos de la estación, favoreciendo a los campesinos de nuestras regiones.
En el caso de alimentos más calóricos, que también están asociados al invierno, en especial días de lluvia, como:
- Sopaipillas.
- Sopaipillas pasadas.
- Picarones.
- Pajaritos.
- Colegiales.
- Kuchen.
- Postres de leche.
Se pueden disfrutar con un consumo moderado 1 o 2 unidades, o 1 porción regular en caso de adultos. Recuerde que estas preparaciones están pensadas en el disfrute junto a la familia y amistades, y no a “sobrevivir” durante el invierno. Estas preparaciones tradicionales pueden ser parte de una alimentación saludable, ya que su consumo es ocasional, y no es necesario “masacrar” una sopaipilla, transformándola en “sopaipilla saludable” agregando harina integral y en cocción al horno, en ese caso coma pan integral.
Si el consumo de preparaciones tradicionales y de dulces o alimentos que se consumen en días de lluvia es esporádico, no habrá consecuencias como el aumento de peso, grasa corporal o que se nos dispare el colesterol.
*Samuel Durán Agüero, PhD, MSc. Nutrición y Alimentos. Académico Investigador y director Magister Nutrición en Salud Pública en la Universidad San Sebastián.