Los supercontagiadores: paciente de Wuhan recuerda el caso de cocinera irlandesa y médico chino
Paciente de Wuhan que enfermó a 16 funcionarios de salud con el nuevo coronavirus vuelve a la memoria el caso de una cocinera irlandesa que contagió fiebre tifoidea a más de 50 personas y estuvo 23 años en cuarentena obligada en Estados Unidos.
Súper contagiadores o súper esparcidores. "Super spreaders", en inglés. Personas que se contagiaron con alguna enfermedad y por distintas razones se transformaron en un foco de infección para un gran número de personas, superior a la tasa de contagio habitual.
Ocurrió recientemente en China donde un solo hombre contagió con el nuevo coronavirus al menos a 16 personas al interior de un hospital en circunstancias en que el contagio promedio de una persona enferma es de casi cuatro personas.
Antes fue un médico que transmitió el Sars a personas con las que tuvo contacto en un hotel y desde ahí se diseminó por el mundo.
Sin embargo, la más recordada con esta categoría fue Mary Mallon conocida también como "Mary, la tifoidea".
Esta mujer irlandesa llegó a Estados Unidos cuando solo tenía 15 años. Era 1883, tiempos en los que la joven se dedicó a trabajar en el servicio doméstico en distintas casas de Nueva York. Con el tiempo, sus habilidades como cocinera se fueron afianzando y comenzó a ganarse la vida como cocinera destacando entre distintas familias de la elite neoyorkina por sus deliciosos helados artesanales de duraznos frescos trozados a mano.
Durante el tiempo que fue cocinera, se le considera responsable por la muerte de tres personas y más de cincuenta contagiados por fiebre tifoidea, una enfermedad que de acuerdo a los exámenes realizados ella llevaba consigo pero que nunca le causaron síntomas o molestias evidentes.
Era 1900 cuando la mujer trabajaba para una pudiente familia y con apenas dos semanas viviendo en esa casa, ocho personas enfermearon con fiebre tifoidea. Al año siguiente, ocurrió lo mismo pero con una familia para la que trabajaba en Manhattan.
Cinco años después, en 1906 y mientras cocinaba para la familia de un banquero en Long Island, siete personas más enfermaron, todos por fiebre tifoidea.
No pasó mucho tiempo para que las sospechas recayeran en ella. Aunque negaba estar enferma, debió someterse a pruebas de sangre y de heces obligada por la autoridad sanitaria que demostraron la presencia de la bacteria que causa la fiebre tifoidea (Salmonella typhi).
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Mary Mallon en el hospital.[/caption]
La justicia determinó que debía ser recluida en el hospital Riverside, un centro especialista en infecciones. Allí permaneció hasta 1910 cuando decretaron su libertad pero con la prohibición de seguir trabajando como cocinera.
Ya de vuelta a su vida, se desempeñó como lavandera, pero el sueldo no era el mismo por lo que se cambió de nombre y consiguió trabajo nuevamente como cocinera. En 1915, mientras la mujer trabajaba en una maternidad hubo un brote de fiebre tifoidea: 25 personas enfermas y dos fallecidas. La investigación que se abrió entonces descubrió que una de las cocineras Mary Brown era la misma Mary Mallon.
La cocinera irlandesa esta vez huyó pero la policía la encontró y de nuevo fue enviada al hospital para infecciosos. Esta vez, sin posibilidad de salir. Allí permaneció hasta 1938, cuando murió a la edad de 69 años. Fueron más de 23 años en cuarentena obligada, años en los que se dedicó a labores de limpieza en el mismo hospital. En todo ese tiempo no recibió ninguna visita.
Caso chino
El 7 de enero de este año, cuando ya se cumplía casi un mes del primer caso de neumonía por coronavirus en Wuhan, un hombre de 69 años fue sometido a una cirugía en el Hospital la Unión de esta ciudad. Mediante una neurocirugía, los médicos extrajeron un tumor que tenía alojado en su hipófisis.
El procedimiento fue exitoso pero cuatro días más tarde el hombre aún en recuperación de su operación, presentó fiebre y síntomas respiratorios: en su cuerpo se estaba replicando el nuevo coronavirus y como no había desarrollado signos antes de ingresar a pabellón no se controló su temperatura y tampoco se tomaron mayores precauciones. ¿El resultado? Al menos 16 funcionarios de ese hospital también enfermaron de neumonía por el nuevo coronavirus.
Cuando el diagnóstico de neumonía por causa desconocida fue comprobado por la tomografía computarizada (el examen mostraba infección en ambos pulmones) el hombre fue puesto en aislamiento. Todavía no se desarrollaba el examen que hoy permite confirmar la presencia de coronavirus.
Recién el 15 de enero, una semana después de la cirugía, cuando su condición ya había empeorado, fue trasladado al Hospital Jinyintan de Wuhan, un centro de enfermedades infecciosas. Por esos días, personal médico y de enfermería que lo había atendido también comenzaron a presentar síntomas respiratorios. Se estima, que este solo paciente, contagió al menos a 16 funcionarios del hospital en que fue intervenido.
Por las fechas, este caso abre también la discusión respecto de la demora en los anuncios de parte de las autoridades chinas.
El contagio de los funcionarios confirmado ya el 16 de enero no fue informado en las actualizaciones diarias de esos días y no fue hasta el 20 de enero que el neumonólogo chino Zhong Nanshan, el mismo que trabajo contra la epidemia de Sars en 2003, reconoció que el nuevo corona virus sí se podía transmitir de persona a persona.
El médico del Sars
El Sars es otro coronavirus que surgió también en China en 2002 con los primeros casos, pero se identificó recién en 2003.
El médico chino Liu Jianlun, nefrólogo jubilado, había estado en contacto con algunas personas enfermas ya que ocasionalmente trabajaba en el Hospital Zhangshon N° 2, en el estado de Guandong.
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FOTO: Archivo.[/caption]
Los primeros síntomas (fiebre y molestias respiratorias) aparecen el 15 de febrero de 2003 pero de igual forma viaja el 21 de ese mes a Hong Kong, alojando en el Hotel Metropole, un entonces reconocido hotel al que llegaban importantes personas de los negocios y de todas partes del mundo.
A él se le sindica como el "paciente cero" que hizo que este virus se diseminara por el mundo. En un solo día (tiempo en el que Jianlun permaneció en el hotel), contagio a viajeros de Vietnam, Singapur, Estados Unidos, Irlanda y Canadá, los que enfermaron al llegar a su país de origen. Otros tres infectados tuvieron que ser atendidos en recintos médicos de Hong Kong donde otros 95 funcionarios de la salud también se contagiaron con Sars.
"Súper excretadores"
A juicio de la infectóloga del Hospital Clínico de la U. de Chile, Jeannette Dabanch, la mejor forma de llamar a estas personas es "súper excretadores"o "súper diseminadores".
Este concepto, dice la especialista, se comenzó a utilizar cuando apareció el Sars en el año 2003 y se refiere a los casos que están relacionados con uno solo en su origen. "No está muy claro el mecanismo por el cual algunas personas sean súper diseminadores", pero se sabe que hay personas que por la reacción de su sistema inmune pueden tener mayor carga viral que otra aun cuando se hayan contagiado al mismo tiempo y desde la misma fuente de contagio.
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