“Cambiaste un Ferrari por un Twingo, cambiaste un Rolex por un Casio”. Una de las más polémicas estrofas de la canción en la que Shakira habla de su ruptura con Gerard Piqué generó revuelo no solo entre las revistas de papel o couche o los portales deportivos.
Ambas marcas de relojes se transformaron en los temas más comentados en las redes sociales mientras la clásica firma de relojes oriental parecía despreciada por la calidad de sus artículos.
Pero aunque la empresa se ha caracterizado por la fabricación masiva de relojes, la historia de la firma nipona incluye varios hitos tecnológicos, además de una fulgurante historia de esfuerzo y empeño, creada por un modesto carpintero japonés.
Tadao Kashio, fundador de Casio Computer nació en Kureta-mura (actualmente Nankoku) en la prefectura de Kochi, Japón, en 1917, según relata su perfil en Wikipedia.
En 1923, tras el Gran terremoto de Kantō, toda la familia Kashio se mudó a Tokio, invitada por un tío que trabajaba allí.
Después de graduarse en la secundaria, Tadao comenzó a trabajar como aprendiz de operador de torno. El dueño de la fábrica reconoció sus habilidades y lo alentó para que estudiara en Waseda Koshu Gakko (ahora Universidad de Waseda). Mientras, Kashio ganaba experiencia en variedad de trabajos, haciendo ollas, sartenes y lámparas para bicicletas, pronto logró una buena reputación que le trajo subcontratos para hacer piezas.
En 1946, Tadao estableció su propio negocio llamado Kashio Seisakujo, en Mitaka (Tokio), para reparar máquinas emisoras de pasajes de avión y reparaba máquinas del aeropuerto.
A los 30 años de edad se inició en el mundo de la tecnología, reparando las máquinas que imprimían pasajes de avión en el aeropuerto de Tokio, después de la Segunda Guerra Mundial, según relata Wikipedia.
Un día le llevaron a su pequeño taller para reparar una calculadora, utilizada en las oficinas del aeropuerto por los militares que controlaban el transporte en Japón, era una máquina grande montada sobre una mesa con ruedas, parecida a un dispensador de bebidas automático, con palancas y teclas mecánicas, basada en la primera computadora de datos que ayudó a los aliados a ganar la guerra.
Entonces con el ánimo y entusiasmo de un joven, que mantenía la mente abierta a las nuevas tecnologías, decidió fabricar una calculadora más pequeña, que pudiera ser transportada de un escritorio a otro. Para reducir su tamaño instaló los primeros transistores conocidos e implementó el teclado numérico con la clave de 0 hasta el 9, considerado la primera solución de alta tecnología de Japón y que es utilizado en todos los sectores electrónicos en la actualidad.
Los militares necesitaban estas calculadoras y las instalaron en las oficinas de transporte, correo, estaciones de tren, servicios, electricidad, teléfonos y ministerios del gobierno, encargado de la reconstrucción del país.
Instaló su primera fábrica de calculadoras en Tokio en 1949, para atender la demanda nacional de un país que se estaba levantando de la destrucción de la guerra.
Luego su curiosidad se dirigió a los nuevos relojes de mesa, que podían funcionar con un pequeño cristal de cuarzo que al recibir el impulso eléctrico de una batería, podían emitir una señal electrónica cada segundo para mover las manecillas convencionales que indicaban la hora.
En 1956 instaló el primer centro de investigación y desarrollo de nuevas tecnologías, para aplicarlas a otras necesidades de la sociedad, en 1969 inventó el primer reloj de pulsera de cuarzo con pantalla digital de cristal líquido (LCD) lo suficientemente pequeño para sujetarlo en la muñeca, el Casiotrón.
En 1970 con las ventajas del centro de investigación y desarrollo, aparecieron varios equipos electrónicos que convirtieron a Japón en el centro más importante del desarrollo de la tecnología electrónica moderna. Así se crearon desde nuevas calculadoras de bolsillo, relojes con cronómetros y traductores de idiomas, convirtiendo a la sociedad japonesa en la más adelantada en el uso de la tecnología en el mundo.
En la década de 1980 fabricó los primeros relojes con videojuegos incorporados.
En 1974 Casio inventó el primer televisor de bolsillo con una pantalla plana en blanco y negro, entonces su fundador Tadao Kashio solicitó al centro de investigación y desarrollo “R & D Center” que la pantalla debía ser en color, para poder mostrar con claridad los colores de la naturaleza, pero le dijeron que no existía una pantalla LCD en color en el mundo.
Entonces el equipo del centro de investigación y desarrollo se decidió a inventar una nueva pantalla de LCD “Liquid Cristal Display” en color de TFT “Thin-Film Transistor”, que cambia la luz que emite al recibir distintas frecuencias eléctricas, considerado el mejor invento de la empresa Casio y motivo de orgullo para su fundador, considerado uno de los padres del Japón moderno.
Dicha tecnología fue patentada por Casio y, siguiendo vigente.