El surgimiento de la variante india o Delta como la bautizó la Organización Mundial de la Salud (OMS), sigue generando preocupación, no solo porque su velocidad de contagio, sino también porque se sabe está reinfectando más fácilmente a personas que se habían contagiado antes con otras variantes y porque personas vacunadas, también se están enfermando e ingresando a los centros de salud.
Los últimos estudios han demostrado que la variante Delta es dos veces más contagiosa que la variante británica o variante Alpha y que también la duplica en el riesgo de hospitalización.
Respecto de las vacunas, un estudio escocés midió la respuesta de las personas inoculadas con la vacuna de Astrazeneca con la que se ha vacunado la mayoría de los británicos.
Pero, qué puede ocurrir en los países como Chile, Brasil o China que mayoritariamente han vacunado a la población con la vacuna Coronovac del laboratorio Sinovac BioNTech.
La Dra. Susan Bueno, académica de la Universidad Católica, investigadora del Instituto Milenio en Inmunología e Inmunoterapia (IMII) y directora científica del ensayo clínico con adultos que se realizó en Chile con la vacuna Sinovac, señala que “aún se requieren de estudios para poder evaluar si los anticuerpos y células inmunes inducidos por la vacuna son capaces de reconocer a la variante Delta”. “Actualmente estamos estableciendo ensayos en nuestro laboratorio para poder evaluar la actividad neutralizante de los anticuerpos por métodos in vitro, lo cual podría dar luces del nivel de protección ante esta variante”, indica.
Pablo González, también investigador de la UC, del IMII y director ejecutivo de este estudio clínico, menciona que la vacuna Sinovac, contiene varias proteínas del virus, por lo que linfocitos T generados por la vacuna podrían reconocer elementos de la variante Delta que no se modifican respecto a la cepa original.
“Un estudio en Reino Unido indica que las vacunas en uso en ese país presentan una disminución en su efectividad frente a la variante Delta, pero de todos modos protegen de forma muy significativa. En personas vacunadas con una sola dosis, esta protección cae dramáticamente”, señala González.
Como la información sobre el nivel de protección que la vacunación pueda conferir no está disponible, explica Alexis Kalergis, académico de la Universidad Católica y director del IMII, “es muy importante ser cautos y tomar todas las medidas de prevención del contagio que ya conocemos: uso de mascarilla, lavado de manos, distanciamiento físico con otras personas”. “Esta variante ha demostrado ser mucho más contagiosa”, agrega el director del ensayo clínico realizado en Chile.
Estudio en la “vida real”
En abril de este año, el Ministerio de Salud dio a conocer el 1º Reporte del estudio “Efectividad de la vacuna CoronaVac con virus inactivado contra Sars-CoV-2 en Chile”.
Según este informe, en la “vida real”, la vacuna Sinovac, la que más se ha inoculado en Chile sí protege de los síntomas, hospitalizaciones, ingreso a la UCI y muerte, al menos con las variantes que entonces circulaban (febrero-abril) .
Estos resultados se basaron en el seguimiento de 10 millones 500 mil personas, de los cuales, cuatro millones fueron inoculados con segundas dosis. Así, tendrían una protección del 67% de efectividad en casos de Covid-19 sintomático; 85% de efectividad en hospitalización; 89% de efectividad para prevenir ingreso a UCI y 80% de efectividad para prevenir muerte.
En este sentido, explicó, ese 67% de efectividad para prevenir Covid-19 sintomático quiere decir que de 100 personas vacunadas con las dos dosis, que se hubieran infectado con el virus, solamente 33 de ellas tendrían contagio con síntomas. En la prevención de la muerte, implica que de 100 personas que hubiesen muerto por Covid-19, 20 lo harán si estamos todos vacunados.