A estas alturas, pocos dudan de la efectividad de las mascarillas como medida preventiva para el contagio del coronavirus, enfermedad que hasta ahora ha costado la vida de 1,1 millones de personas en todo el mundo.
En los últimos 10 meses que llevamos de pandemia, diversos estudios han indagado en los efectos de este accesorio para protegernos del virus, desde mascarillas caseras, las mejores o peores mascarillas o la posibilidad que debamos utilizarlas no sólo hasta tener una vacuna, sino por varios años más.
Pero en términos masivos y a largo plazo, ¿cuál es su efectividad? más de 800 mil personas podrían salvarse en cuatro meses, según un estudio, pero sólo si todo el mundo las utiliza.
La investigación, realizada gracias a la Fundación Bill y Melinda Gates y Bloomberg Philanthropies, reveló que las máscaras parecían reducir el riesgo de propagación del coronavirus en nada menos que un 40 por ciento, de acuerdo a un modelo informático del University of Washington’s Institute for Health Metrics and Evaluation (IHME).
En los resultados, se estima que si el 95% de las personas utilizaran una mascarilla al estar en el exterior durante una semana, se podría evitar un estimado de 815.600 muertes entre el 26 de agosto de este año y el 1 de enero de 2021, siendo los países donde el uso del accesorio es bajo, los más beneficiados en términos de cifras.
Como referencia, el estudio considera un escenario ficticio y más pesimista en el que se hayan disminuido las medidas para prevenir la propagación del virus durante seis semanas, también durante el mismo período, dando como resultado 3 millones de muertes. Sin embargo, si todo el mundo utilizara mascarillas, esta cifra descendería a 2,18 millones de fallecidos, un 26,5 por ciento menos.
Para su investigación, el equipo examinó 40 estudios existentes sobre la eficacia de las máscaras para bloquear la propagación de infecciones virales respiratorias, incluyendo el coronavirus, SARS y la gripe, así como encuestas realizadas entre marzo y agosto de 2020 en las que personas de todo el mundo dijeron si usaban una máscara fuera del hogar o no.
“El uso de mascarillas se estimó en el 59,0% de las personas en todo el mundo el 18 de agosto, desde el 41,9% en África del Norte y Oriente Medio hasta el 79,2% en América Latina y el Caribe. El efecto del uso de mascarilla universal es mayor en países como India (158,832 menos muertes en el escenario de mascarilla universal), Estados Unidos (93,495 muertes menos) y Rusia (68.531 muertes menos)”, dice el estudio.
“El número creciente de víctimas de la pandemia de Covid-19 puede reducirse sustancialmente mediante la adopción universal de máscaras. Esta política de bajo costo, ya sea habitual o obligatoria, tiene enormes beneficios para la salud y probablemente también grandes beneficios económicos, al retrasar la necesidad de volver a imponer los mandatos de distanciamiento social”, añade.
La Dra. Inia Pérez, jefe de infectología de la Clínica Alemana, afirma que "de los números no se puede decir mucho, porque son estimaciones. Lo que sí está demostrado, es que el uso de mascarilla efectivamente disminuye la propagación del virus ya que atrapa muchas de esas micropartículas que emite el infectado, por lo que a través de su utilización disminuimos el contagio”.
“El problema con el coronavirus es que al haber pacientes asintomáticos no podemos decir quiénes están contagiados o no, y por eso se recomienda el uso universal de la mascarilla ya que esa es su ventaja”, agrega.
“El llamado es al uso de mascarilla, respetar la distancia, el lavado de manos y seguir manteniendo las medidas, independiente que los casos estén estables en este minuto, porque de lo contrario nos podemos exponer a un rebrote”, dice la infectóloga.