Un comunicado de prensa en el que acusan presiones para que la evaluación de la vacuna china Sinovac Biotech, contra Covid-19 esté lista para el 10 de enero publicó ayer la directiva de la Asociación de Funcionarios Profesionales del Instituto de Salud Pública (Aprus).

Según este documento presentado por uno de los tres gremios existente en esta entidad, esta presión tiene su origen en que a fines de mes, y tal como lo ha anunciado el propio Ministro de Salud, Enrique París, llega el primer embarque de estas vacunas al país como parte del contrato que se estableció con la farmacéutica china. De los 10 millones de dosis, dos millones llegarán en dos semanas.

El pasado 28 de diciembre, la Central Nacional de Abastecimiento (Cenabast) presentó ante el ISP una solicitud para uso excepcional de la vacuna -debido a que Sinovac no tiene representación en Chile-, la misma estrategia que hizo el laboratorio Pfizer para la autorización de su vacuna, la única aprobada en el país hasta este momento.

El director del Instituto de Salud Pública (ISP), Heriberto García, explica que autorización de uso y de importación son dos procesos diferentes. En el caso de la vacuna de Pfizer se autorizaron los dos al mismo tiempo, por lo tanto una vez autorizado el uso excepcional, se inició la importación.

“El rol del ISP es asegurar que las vacunas sean seguras y eficaces”, pero en tiempo de pandemia, también se debe velar por la oportunidad de tener vacunas dice García. En esa lógica fue que se aseguró la llegada de las vacunas chinas, pero eso no implica que se puedan usar. Una vez en el país, estas dosis se guardan en un depósito farmacéutico o droguería, una bodega que cumpla con los estándares de mantener las vacunas a una temperatura entre 2 y 8 grados y no se sacan de ahí sino cuentan con la autorización de uso, señala.

Foto: Reuters

Respecto de la declaración de la Aprus, García señala que “los funcionarios del ISP están todos comprometidos en sacar adelante las tareas” y que al igual que los funcionarios, incluso de ese mismo gremio, están sorprendidos. “Hacen alusión a presiones que no existen, hablaron de fechas que no corresponde, de refrigeradores que tampoco corresponde porque no es una información que el ISP maneje. Las bases de esa misma directiva no están de acuerdo con ese comunicado”, insiste.

Igual como ocurrió con Pfizer y como ocurrirá con la recién presentada solicitud de aprobación excepcional de Oxford, para Sinovac hay de plazo 15 días hábiles para su evaluación, lo que podría suceder en los próximos días.