Que las calles de Chile se han teñido de morado y verde cada 8 de marzo en los últimos años no es casualidad. La necesidad de garantizar concretamente los derechos de niñas, adolescentes y mujeres que han exigido y luchado por años los movimientos feministas, hoy busca consagrarse en nuestra nueva constitución. Porque aún, año 2022, seguimos siendo fuertemente discriminadas, violentadas y asesinadas por el sólo hecho de ser mujeres.

Por ello, no es sorpresa que la primera iniciativa popular constituyente en ingresar a la discusión fue la presentada por la Asamblea Permanente por la Legalización del Aborto, denominada “Será Ley”, la cual alcanzó las 15 mil firmas en tan solo cinco días. En esa misma línea, convencionales feministas de forma transversal presentamos una iniciativa que busca consagrar que todas las personas son titulares de derechos sexuales y reproductivos. Estos comprenden, entre otros, el derecho a decidir de forma autónoma e informada sobre el propio cuerpo y sobre el ejercicio de la sexualidad, la reproducción, el placer, la anticoncepción, la maternidad voluntaria y la interrupción voluntaria del embarazo.

Entre enero y agosto de 2021, 366 mujeres fueron imputadas por el delito de aborto, lo que se ha traducido no sólo en leyes que nos persiguen por tomar decisiones autónomas sobre nuestro cuerpo, sino que además en un sistema de justicia que reafirma esa persecusión. Así, una reforma de enfoque tanto en el acceso a la justicia como en la administración de la misma es esencial. Por ello, con el objetivo de garantizar una Justicia Feminista, también iniciativa de norma constituyente presentada y respaldada por convencionales feministas, buscamos garantizar que en la función de administrar justicia, como en el conjunto del proceso judicial, deberá emplearse el enfoque de género, derechos humanos e interseccionalidad, asegurando procesos formativos y de capacitación de todas las y los funcionarios en estas temáticas.

Estás últimas semanas la convención se ha teñido de verde y morado más que nunca; y la invitación es acostumbrarse a ello, pues, y no me canso de decirlo ni resaltarlo, somos el primer país del mundo en escribir una constitución en paridad, y demostraremos lo que ello significa para garantizar correctamente el goce y ejercicio de nuestros derechos.

*Tammy Pustilnick es constituyente del colectivo Independientes No Neutrales.