Como el trabajo más intenso que le ha tocado en su vida, pero también como una de las experiencias donde más ha aprendido. Así define el periodo de campaña el periodista, y ahora candidato a constituyente, Patricio Fernández.
Sus recorridos van desde la población Lo Hermida hasta el sector de Lo Curro, donde asegura ha tenido una relación de “amor-odio” con la campaña en los semáforos. “No hay cosa más molesta que cuando tú te vas a acercar a un auto a entregarle una información y la persona sube el vidrio. Ya es bastante doloroso cuando no lo bajan y miran para el lado, pero cuando alguien los sube, el acto de violencia es superior, y es un buen ejemplo de lo que tenemos que corregir en Chile”, explica.
¿Qué lo motivó a convertirse en candidato a constituyente?
Vengo haciendo crónicas de este país desde hace muchos años y hace tiempo me parece evidente la necesidad de un ajuste de nuestra democracia y me pareció que era una cobardía o una falta de compromiso inaceptable no estar ahí si es que me lo proponían y me lo pedían, porque no fue algo por lo que yo peleara sino que fue algo que me propusieron.
¿Por qué va como independiente en cupo del Partido Liberal?
Me gustó mucho la invitación del Partido Liberal y de la agrupación que se llama hoy día Nuevo Trato porque es un espacio político cultural nuevo que entiende que la era concertacionista está terminada, muerta, y que se distancia de esa respuesta en la que se fue atrincherando el Frente Amplio con respuestas más bien viejas, extremadas, reacias a la búsqueda de un acuerdo general y amplio. Me parece interesante de este espacio político la apertura a inventar y a buscar nuevas respuestas.
¿En qué podría beneficiar o afectar ser independiente en este distrito?
Los partidos tienen la facultad de conocer la organización ciudadana, cuando uno está solo es más difícil. El ser independiente me ayuda a establecer un diálogo más fresco con esa ciudadanía que está muy reacia y aburrida de los discursos políticos tradicionales. No tengo una carga que defender ni unas promesas anteriores incumplidas que mantener en pie.
¿Cuáles son sus principales propuestas?
Esta carta de navegación que genera estabilidad no se va a conseguir sin un pacto social que garantice derechos sociales, que garantice el derecho a la salud, a la educación, a las pensiones, a la vivienda y a la conectividad a la red en tiempos en que quienes no están conectados se convierten en marginales. Creo que hoy cualquier insistencia en la lógica neoliberal no sólo resulta indolente sino que también obtusa y suicida; el desarrollo de Chile a mediano plazo requiere un ajuste. Por otra parte, el gran reto es integrar y sería interesante que esta Constitución comience definiendo la palabra dignidad. Si la definimos en conjunto vamos a tener un gran punto de partida, habremos formado un corazón y una referencia para las discusiones posteriores.
Como periodista, fundador y exdirector de The Clinic, ¿tiene propuestas relacionadas a las comunicaciones?
Me preocupa muchísimo garantizar la libertad de expresión, creo que ese es un principio que debe quedar taxativamente protegido. ¿Cómo vamos a hacer para seguir garantizando la existencia de información fidedigna que le dé espacio a las distintas miradas del mundo y que al mismo tiempo nos genere confiabilidad? Va a ser un gran reto.
¿Qué opina de que varios candidatos que estuvieron por el Rechazo ahora quieran ser parte de la Convención?
Todos debemos participar de la redacción de la nueva Constitución, pero es importante que todos sepan que esos que estaban por el Rechazo lo que querían era que permaneciera la Constitución existente, deseaban que no se produjeran transformaciones por las que muchos hemos peleado a lo largo del tiempo. Sin duda es chocante tenerlos hoy día discurseando como si esto hubiera sido su deseo de siempre, cuando es claro que lucharon en contra de él.
¿Qué le ha parecido la franja, considerando que muchos partidos incluyeron ahí a sus cartas presidenciables?
Creo que el mundo de los partidos políticos aquí ha demostrado una falta de comprensión de la importancia del momento que vivimos bien increíble. Siguen muy aferrados a sus intereses locales, a mantener sus parcelas de poder en lugar de entender que aquí estamos ante una configuración política mayor.
¿Qué tipo de izquierda cree que sería conveniente que llegue a la Convención?
Creo que a la Convención es bueno que lleguen todas las posturas y que sean representativas de la realidad sociopolítica y cultural de Chile. Ciertamente la izquierda que me gusta es la que cuestiona, que duda, que reflexiona, que escucha, que atiende, que entiende que los retos por venir tienen tanta novedad que hay mucho que aprender, que tiene como gran lema en su cabeza una curiosidad con respeto, interés real por escuchar al otro, cualquiera sea.