Aunque ya en las filas de la oposición estaban coordinados para continuar con las clásicas reuniones de los días lunes entre las colectividades de izquierda, la primera de ellas como ex Nueva Mayoría fue un fiasco.
Además de la inasistencia del presidente del PC, Guillermo Teillier -quien envió en su reemplazo al dirigente Juan Andrés Lagos-, la DC brilló por su ausencia. Si bien su presidenta, Myriam Verdugo, aseguró que se trató de un choque de horarios tras reunirse con parlamentarios de la oposición venezolana, mantuvo en suspenso su decisión de seguir participando de los encuentros.
"Para ser oposición, hemos dicho que no necesitamos ser coalición política. Además, la DC inicia un proceso interno para tratar de superar la crisis que está viviendo y, por lo tanto, las alianzas políticas tienen que esperar. (…) No sabemos si vamos a seguir yendo o no, es una decisión que va a tener que analizar el partido", señaló la dirigenta de la colectividad, lo que ya avizora la lenta agonía del conglomerado.