Lleva dos meses como secretario del Senado y ya anunció los cambios que quiere implementar en la corporación.
Se trata del exfiscal Raúl Guzmán, quien tras una cuestionada postulación, finalmente juró el 7 de mayo en el nuevo cargo.
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Y cuando han pasado varias semanas desde que llegó al Congreso, el exencargado de la Fiscalía Regional Metropolitana Sur estableció los ejes en los que espera realizar modificaciones a corto, mediano y largo plazo.
Para comunicar su plan de trabajo, Guzmán convocó a los senadores -miembros de la Comisión de Régimen Interno- a una sesión especial el jueves 20 de junio.
En la cita, que se prolongó por casi cuatro horas, el exfiscal anunció que pretende crear tres nuevas áreas en el Senado, las cuales deberían estar en funcionamiento a más tardar antes de que termine el año legislativo de 2019.
La primera de ellas es una nueva unidad de comunicaciones, donde se estrenará la figura del "vocero". Una nueva autoridad encargada de abordar con los medios de prensa distintas temáticas relativas a la corporación.
La segunda área será la unidad de auditorías. Quienes trabajan con el exfiscal aseguran que Guzmán ha encontrado deficiencias en los controles de procesos de contrataciones, viajes y actividades en el Senado. Y, por último, se dará origen a la unidad de planificación y control de gestión, donde Guzmán establecerá metas específicas para los funcionarios del Senado. Todo con un cronograma de trabajo y un seguimiento de cumplimiento de labores.
