No tengo la paciencia oriental. Mi abuelo fue un inmigrante chino que llegó a trabajar a una pulpería en el norte. Tengo otros rasgos heredados. Me gustan los colores fuertes, el dorado y el rojo. También me gusta la cocina y la cultura oriental. Tengo pendiente conocer China.
Es importante humanizar el rol del fiscal. Una no va a estar muerta de la risa o contando chistes en una audiencia. Nosotros trabajamos con víctimas que deben saber que detrás de ese rol hay una persona dispuesta a jugarse para lograr una sanción. Y para eso uno tiene que transmitir empatía y cercanía.
Star Wars explica muchas cosas que suceden en la realidad. Es mi película favorita. La vi por primera vez en el Cinerama de Santa Lucía y me volví fanática. Tengo una colección de muñecos en mi oficina. Mis personajes favoritos son Leia y Darth Vader. Desde chica me siento identificada con personajes femeninos potentes. A Darth Vader lo considero un personaje sumamente humano, con contradicciones que lo hacen muy querible. Hay algunas cosas de las películas que me recuerdan mi trabajo, pero eso es mejor reservárselo.
No tenía miedo de ser diferente. Si a las chiquillas les gustaba el pelo liso, a mí me encantaba ser crespa. Explotaba mis diferencias. Me gustaba ser la chinita del curso y engrupía a mis compañeros. Les decía que sabía hablar chino e inventaba palabras. Nunca seguí modas. Era una cosa medio contracultural.
Son los hombres fiscales los que investigan los delitos económicos o de corrupción. En la fiscalía muchas veces se reproducen prejuicios y roles de sociedad patriarcales. Ese es un ejemplo. Las mujeres casi siempre deben investigar delitos relacionados con la familia o en contra de niños.
Mis dos hijos se definen como feministas y eso es una chochera para mí. Los he criado como hombres críticos de su entorno. Soy una mamá bien regalona. Trato de ser bien partner, respeto sus espacios, pero siempre me interesa involucrarme en sus actividades.
Lo digo con culpa: tengo música de Chayanne y Alberto Plaza. Uno siempre tiene que tener sus vergüenzas. El resto de la música que me gusta es puro rock. Voy a ir a ver aRoger Waters en noviembre. Soy bien rockera.
Siempre fui de pelear por causas perdidas. Cuando niña era bien mañosa. Una vez me echaron de un jardín infantil por revoltosa: quería aprender a leer y organicé una marcha. Siempre defendí a mis compañeros y compañeras.
Uno nunca puede creerse un personaje. Los fiscales nos hemos convertido en personalidades reconocidas durante los últimos años. En la calle algunos me reconocen y hasta me han pedido selfies. Hay que trabajar el ego. Eso siempre es un error.
Cuando llegué a Valdivia casi no salió el sol en tres meses. Trabajé muchos años allá, me gustaba la vida en provincia. Recuerdo que desde junio a agosto solo salió una vez el sol. Me recomendaron decorar con colores luminosos mi casa. Con el tiempo el gris te aburre.