Científicos de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Chile demostraron, tras finalizar una investigación de cinco años, que hay cepas de Salmonella entérica en las gaviotas dominicanas de Chile (las más comunes del país), las que además presentan resistencia a múltiples fármacos y diferentes combinaciones de genes asociados con la enfermedad.
Este descubrimiento sería clave para acotar las hipótesis respecto al contagio de la enfermedad, que ahora se reducen a la contaminación ambiental que produce el ser humano por manejo inadecuado de desechos de la industria ganadera, hasta una posible trasmisión a través del contacto con aves migratorias.
La contaminación a las personas, según uno de los investigadores, se efectúa probablemente por el agua, que a su vez contamina los productos del mar, como por ejemplo pescados o mariscos. Luego, mediante su consumo llegan estas bacterias al ser humano.