Sólo tres meses fuera del gobierno alcanzó a estar el ex seremi de Vivienda de la VI Región Wilfredo Valdés, quien renunció en junio pasado a su cargo debido a su vinculación con el caso Caval. Entonces el funcionario afirmó en un comunicado que puso su cargo "a disposición de la ministra de Vivienda, Paulina Saball" para dedicarse a su defensa judicial. "Quiero señalar que he decidido asumir mi defensa con mayor fuerza, decisión y de manera personal y no como autoridad. Creo necesario que mis acciones en este aspecto no afecten las labores de mi equipo en la Seremi (...) Esta decisión me dejará en libertad para tomar las acciones que sirvan para esclarecer las dudas que se han planteado respecto a mi persona", señaló.
No obstante, según la información del portal gobierno transparente, el 1 de septiembre el arquitecto fue contratado por la Junta Nacional de Jardines Infantiles como inspector técnico de obras con un sueldo mensual bruto de $2.400.000.
El vínculo de Valdés con Caval se debe a que, el 2013, antes de llegar al gobierno fue él quien tasó para el Banco Santander los terrenos que quería adquirir la empresa de la nuera de la presidenta Michelle Bachelet, Natalia Compagnon. Diligencia en la que estuvo acompañado por el dueño de Caval, Mauricio Valero, y la arquitecta que trabajaba para la Municipalidad de Machalí, Cynthia Ross. El 2014, ya como seremi del gobierno de Bachelet, se reunió con el ex director de Obras de Machalí, Jorge Silva, para tratar el cambio en uso de suelo en la zona, y luego llamó a una licitación para hacer un cambio en el plan regulador intercomunal. Al estallar el caso Caval, Valdés negó conocer a Valero o tener participación en el negocio.