Una visita inesperada a la región de Valparaíso causó suspicacias el fin de semana pasado. El agente de Chile ante La Haya por la demanda boliviana, José Miguel Insulza, fue el invitado de honor y dictó una conferencia magistral en de la inauguración del Centro de Estudios Públicos de Aconcagua (CEPA), un think tank creado por un grupo de profesionales independientes de la ciudad de Quillota. Con su soltura habitual, el jefe del equipo chileno habló de todo, principalmente de política, algo que le ha traído problemas en los últimos meses, pues sus últimas definiciones en materias que no son propias del proceso internacional le han valido críticas. En el encuentro el ex secretario general de la OEA, se dio maña para hablar de las reformas del gobierno y de la necesidad de construir consensos más amplios.
Su visita a la zona generó inmediatos comentarios en una región atochada de interesados en llegar al Senado por los cinco cupos que ofrece gracias al nuevo sistema electoral. Ocurre que el PS no tiene candidatos y los socialistas ven en Insulza una carta segura para ganar terreno, frente las disputas que se darán en la DC, donde Aldo Cornejo buscaría arrebatarle el escaño a Ignacio Walker; y el PPD con la disputa segura que se dará entre el diputado Marco Antonio Nuñez y el senador Ricardo Lagos Weber.