Cuando son pocos minutos antes de las nueve de la noche, Alberto Luengo (59) llega a su casa y enciende los dos televisores en los que, todos los días de la semana, ve las noticias. En una de las pantallas mira 24 Horas Central de TVN y en la otra va haciendo zapping para ver qué trae la competencia.

Desde hace un año y medio que Alberto Luengo es el director de prensa de TVN, y desde el 26 de octubre pasado que pusieron en marcha un renovado noticiario central, con conductores nuevos —Matías del Río y Mónica Pérez—, y una escenografía que les permite mayor dinamismo, mayor cercanía y mayor provecho de distintas plataformas para explicar aquellas noticias más complejas. Un noticiario más moderno que debutó en medio del peor momento histórico de TVN, con cifras rojas en lo económico y con programas que no logran repuntar los ratings bajísimos que se han repetido durante todo 2015.

En este contexto negativo, Luengo analiza todos los cambios que ha vivido el departamento de prensa.

"Tenemos una evaluación positiva del campo en múltiples aspectos, aunque no necesariamente en el aspecto de rating, porque nosotros nunca pensamos que con el cambio de noticiero íbamos a mejorar eso. Lo que siempre pensamos fue actualizar la entrega informativa a los tiempos que corren, con una puesta en escena más novedosa y dinámica. Además, incorporamos una gran pantalla interna que permite visualizar temas que son difíciles de explicar en contenido televisivo clásico, de manera que estamos contentos porque ha resultado tal como lo habíamos previsto: la gente ha mejorado su experiencia de visionado del noticiario, y en diversas redes sociales nos han felicitado particularmente porque le permitimos a la gente comprender un poco mejor los temas complejos, que era nuestro principal objetivo como televisión pública".

—Un cambio en un momento muy difícil ¿Cómo han sobrellevado todo eso?

—Es importante decir que el noticiario sí logra construir rating, que es una de las cosas que más valora la televisión. Es decir, recibe bajo y entrega algo. No podría ser tan tajante, pero creo que somos uno de los programas que más rating construimos, más o menos duplicamos el que recibimos. Es muy distinto, igual, un promedio de 8 puntos obtenidos cuando recibes en 12 y entregas en 6, que obtenido cuando tú recibes en 6 y entregas en 12. Es el mismo promedio, pero la construcción de audiencia es muy valorada y permite que el prime tenga una base mejor para competir…

—¿Esa construcción no se daba antes de los cambios?

—Se daba, pero ha mejorado desde que hicimos los cambios, ahora es una construcción más sólida. Hay gente que nos viene a ver. Antes nos demorábamos más en empezar a construir.

"No podría ser tan tajante, pero creo que somos uno de los programas que más 'rating' construimos, más o menos duplicamos el que recibimos"

—¿Y cómo ha tomado el equipo todo este tiempo de crisis?

—Nuestro equipo tiene la suerte de que tenemos varias plataformas de contenido noticioso, aparte del noticiero central. Es importante destacar que para el canal de noticias 24 Horas este año ha sido el mejor de su historia, llegando a duplicar a su competencia directa cuando antes le sacaba un 20% de distancia. Y nuestro sitio de noticias (24horas.cl), a pesar de que ha aumentado la competencia de los otros canales, sigue siendo por lejos la plataforma de noticias más vista de cualquier canal, y una de las tres primeras del país si consideras las cifras de

ComScore.

Como departamento de prensa miramos el conjunto y no sólo nuestro noticiero central, y por eso estamos satisfechos.

—En este mal momento del canal, ¿qué le pide TVN a su departamento de prensa?

—Yo prefiero pensar lo que nos pide el país, lo que nos demanda la sociedad. A TVN siempre le han pedido información imparcial y garantías de que todos los asuntos van a ser tratados con el mismo rigor. Esa es mi misión, la que tenía el director anterior y la que tendrá quien me suceda. Y el canal nos pide que seamos competitivos en la medida que podamos, en el contexto de rating que nos entregan, que seamos los primeros en las grandes noticias, que tengamos una capacidad de estar encima de los temas, y que mantengamos en alto el bien ganado prestigio periodístico del canal.

—También hay programas como El Informante, que tiene una buena valoración de contenidos, pero tampoco tiene grandes audiencias…

—A El Informante también se le exige un cierto nivel de rating adecuado a su contenido, y cuando nos va mal, nos preocupamos y cuando nos va bien, nos alegramos, dentro del rango que se puede esperar de un programa de conversación en horario prime, que no es hacia donde va la televisión masiva de la competencia. Estamos muy contentos porque hemos logrado consolidar El Informante como un programa referente para los asuntos públicos del país, y en ese sentido sentimos que cumplimos en parte nuestra misión.

—Cuando se supo que Amaro Gómez-Pablos dejaba el noticiario, hubo filtraciones acerca de quién sería su reemplazante, con mucho ruido e insinuación de roces internos ¿Cómo manejó todo eso?

—A ver, primero que nada considero legítimo que la prensa y la gente se interese por los cambios de rostro en la televisión. Es parte del negocio. A mí lo que más me apenó y me sigue apenando de este tema es que haya habido una muy mala prensa en torno a Juan Manuel Astorga, en relación a que había supuestas discusiones en TVN de si ponerlo o no, y eso fue completamente injusto para él, porque siempre ha sido considerado uno de los periodistas más relevantes y de mayor prestigio del departamento de prensa. Me dio pena e impotencia, porque fue maltratado su nombre. Pero el resto me parece legítimo y natural en cualquier cambio de rostro, más aún del noticiario central que llevaba 10 años con el mismo conductor.

—¿Cuántos puntos está marcando 24 Horas Central?

—En torno a los 8 puntos.

—¿Y antes de la crisis de TVN?

—Cerca de 15 puntos.

—Era casi el doble...

—Sí. A veces resulta muy frustrante porque tenemos contenidos muy atractivos, hemos tenido golpes importantes este año, como el caso del pitonero que con su chorro derribó a Rodrigo Avilés, o cuando capturamos la imagen de Sergio Jadue en Miami; y muchas otras veces hemos tenido información exclusiva.

A veces frustra no tener el soporte suficientemente fortalecido para ser masivo, porque nuestra orientación es hacia la masividad. Nosotros no queremos hacer un noticiero de nicho ni segmentado, queremos seguir siendo el noticiario que fue número uno de los últimos años. Es frustrante a veces no tener una audiencia más fuerte, pero estamos convencidos de que el canal tendrá que pasar esta mala racha… de teleseries, fundamentalmente. Cuando pase, lograremos una mejor visibilidad.