Los cambios de hora son una medida que cada año pone sobre la mesa el debate de la preferencia ante un huso horario, en relación a los cambios en la rutina que se provocan, para lo cual se extienden varias recomendaciones para mantener un sueño saludable.

Y es que el intercambio entre el horario de verano y de invierno genera un impacto en la vida de las personas, debido a la necesidad de adecuar las actividades al nuevo escenario referente al acceso a luz natural.

¿Cuál es el impacto del cambio de hora en el sueño?

Al respecto, el neurólogo de la Unidad del Sueño de Clínica MEDS, Álvaro Vidal, advierte que la medida puede generar inconvenientes fisiológicos en algunas personas.

“El nuevo horario de invierno provoca un impacto en el ciclo del sueño, y es un impacto mucho más importante de lo que todos pensarían. Los ciclos del sueño se demorarían en normalizarse, en promedio, entre dos días hasta dos semanas, o incluso, más tiempo”, señala.

El desajuste en el ciclo de sueño puede tardar hasta dos semanas en adecuarse por el cambio de hora. Foto referencial.

El profesional explica que el cambio de hora puede producir un desajuste funcional, además de provocar ciclos de sueño irregulares, lo que a su vez aumenta el riesgo de alteraciones como somnolencia diurna o hipersomnia.

Todo va a depender de la edad del paciente y sus condiciones previas. Estas alteraciones se dan en edades extremas, en niños muy pequeños y adultos mayores, habitualmente la dificultad para adaptarse es mucho mayor que los adultos de edad media. Eso sí, no se trata de un trastorno crónico, en ningún caso”, aclara.

Al respecto, el doctor Vidal también señala su preferencia ante la aplicación de un único horario para todo el año. “A pesar de ser sólo una hora, este cambio genera bastante impacto en la calidad del sueño. Lo que se sugiere es que se mantenga el horario de verano, ya que es el más fisiológico y es el que más reproduce, según la época del año, las condiciones normales de luminosidad y de la duración del día productivo”, indica.

Recomendaciones para el sueño ante el cambio de hora

Es por el cambio de hora que comienza a regir el 1 de abril, que el neurólogo Álvaro Vidal entrega sus recomendaciones para tener un sueño saludable y evitar los efectos adversos de la adaptación al horario de invierno:

  • “Cumplir con una rutina horaria de sueño que permita siempre dormirse a una hora y despertar a una hora de la forma más regular posible, manteniendo ese horario durante la semana y el fin de semana”, indica.
  • Lo recomendable es tener un sueño que dure entre 7 y 8 horas, y que este nunca sea menor a 6 horas.
  • Para lograr dichos resultados, es primordial la desconexión de artículos electrónicos, por lo que es importante dejar de utilizar el celular, la televisión o el computador entre una y dos horas antes del momento para dormir.
  • El doctor también indica que “no se debe comer muy tarde y no se debe tomar cafeína después de las 12 del día, ya que así se evita la hiperestimulación o que la persona ande más activa en las horas que se acerca el sueño, y así se logra disminuir el número de veces que la persona orina durante la noche, que es algo que habitualmente corta el sueño”.
  • El llamado es a adecuar la rutina lo antes posible, para lo cual es primordial evitar dormir la siesta y mantenerse alejado de cualquier fuente de luz brillante en horas de la tarde.
  • Buscar relajación antes del sueño. El experto recomienda el uso de “métodos como los ruidos blancos, la audición de música que sea relajante, pero en ningún caso apoyarse de la televisión o de las pantallas”.
  • Respecto al punto anterior, su consejo es “evitar pensar en los problemas del día o planificar el día siguiente cuando ya están acostados en su cama con la intención de dormir.”
  • Para ayudar a la relajación, también se puede tomar un vaso de leche tibia o darse una ducha corta con agua tibia.
Alejarse de las pantallas antes de dormir es fundamental para un sueño saludable. Foto referencial.