Regresa la temporada escolar y con ello el retorno a clases de las vacaciones. Para sobrellevar esta época, existen algunas recomendaciones para contar con una óptima vuelta a la rutina.
Asimismo, son varias las personas que vuelven a sus trabajos tras un descanso y deben retornar a sus horarios y actividades cotidianas.
¿Cómo volver a la rutina?
Según la psicóloga Nicole Alvarado, estos son los consejos para poder sobrevivir a la vuelta a la rutina:
- Regular horarios:
Lo primero es comenzar a normalizar los horarios de sueño, considerando que la mayoría de las personas en vacaciones tienen rutinas diferentes al cotidiano laboral y escolar sobre cuándo levantarse o acostarse.
De ser posible, empezar a regularizar desde siete días antes o durante el fin de semana anterior. Se puede intentar como mínimo acomodar los horarios de despertar y levantar, para llegar a un horario máximo de una hora de diferencia con el que tendrías normalmente para ir al trabajo o al colegio.
- Pendientes:
Organizar lo que se debe ordenar antes de entrar al trabajo, como por ejemplo, comprar útiles escolares, colaciones, insumos para los almuerzos, entre otros. Realizar esto de manera paulatina y evitando acumular todos los pendientes para el último día.
Los dos días antes de regresar a la rutina, lo ideal es no tener pendientes importantes y dedicarlos al descanso o al ocio.
- Actividades recreativas:
Si tienes dificultades para dormir durante tus últimos días de vacaciones (y por eso crees que te costará levantarte), incluye actividades recreativas que demandan más energía, como por ejemplo: bailar, hacer ejercicio o salir a caminar.
- Motivaciones:
Y para que los primeros días sean menos difíciles, se pueden agregar pequeños momentos que te motiven durante la primera semana: llevar tu almuerzo favorito o decidir ir a almorzar a un lugar especial, organizar un panorama corto a la salida del trabajo, darle espacio a las relaciones sociales en el trabajo y/o colegio, como una manera de “premiarte” con algo que te guste después de cumplir con la primera semana.
Lo importante es que logremos volver a generar hábitos (en caso de haberlos perdido) a la vez que mantenemos la sensación de descanso y bienestar que nos entregan las vacaciones.