Las tarjetas de crédito, conforme a la descripción del Sernac, son un instrumento plástico o electrónico que permite que el titular de esta adquiera diferentes beneficios.
Estos pueden ser adquirir bienes o servicios, así como también solicitar avances de dinero en efectivo, aunque todo esto “disponiendo de un cupo de crédito otorgado por el emisor”, es decir, la entidad financiera responsable de la tarjeta.
No obstante, para que este instrumento no sea bloqueado y los usuarios puedan continuar usándolo, los clientes deben realizar el pago mínimo.
¿Qué es el pago mínimo de una tarjeta de crédito?
Este método, de acuerdo a lo explicado por BBVA, corresponde a cuando las personas optan por pagar la cantidad más baja requerida por las entidades financieras para “mantener el crédito vigente o activo en las tarjetas de crédito” y así estas no sean bloqueadas.
No obstante, conforme a lo señalado por la entidad, la cuenta no disminuye, ya que, al pagar el mínimo, “se abona entre el 5 y 10% de la deuda total”, por ende, se acumulan otros gastos, como los intereses y comisiones.
Debido a que la deuda no baja, la CMF señala que, a veces, pagar el mínimo sugerido puede provocar de igual manera un sobreendeudamiento, ya que el monto que se debe liquidar puede llegar a aumentar.
¿Cómo funciona?
El pago mínimo, de acuerdo a lo indicado por la CMF, es determinado por la institución financiera en la que se tiene la tarjeta de crédito.
No obstante, señalan que este pago “no podrá ser inferior a aquellos intereses que se generen producto del uso de la línea de crédito a tasa rotativa o refundida, salvo que exista una promoción asociada”.
Lo anterior con el fin que la deuda no crezca, por lo que el cliente debe estar atento a que esto se cumpla “o tener presente que, si a causa de una promoción decide pagar un monto mínimo inferior a lo antes mencionado, su deuda aumentará”.
¿Es recomendable pagar el mínimo en una tarjeta de crédito?
El Economista explica que, a largo plazo, pagar el mínimo puede llegar hasta “desencadenar un problema financiero”. Esto debido a que, como se explicó anteriormente, con el aumento de los intereses, la deuda puede aumentar mensualmente.
Incluso, el medio asegura que esta deuda podría volverse “imposible de pagar”, a pesar de no realizar nuevas compras.
La CMF infiere que la conveniencia de utilizar este método dependerá de la situación de cada persona. Sin embargo, destacan que las tasas de interés de las tarjetas suelen ser “muy altas”, por lo que recomiendan que las personas se informen sobre otras alternativas.