1. La advertencia del gran empresariado
Luego del recrudecimiento de distintos hechos de violencia observado en los últimos días, como el homicidio de un matrimonio en Graneros, la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) emitió ayer una declaración pública que de seguro dará que hablar. No solo advirtió que Chile está perdiendo la batalla contra la delincuencia y que la inseguridad está afectando la actividad económica, sino que también emplazó a las autoridades a “actuar con decisión” y a “asumir su responsabilidad” con los chilenos.
“Los chilenos vivimos con miedo y hemos dejado de hacer nuestra vida normal porque la inseguridad nos ha obligado a cambiar hábitos, restringir nuestros movimientos y limitar nuestra libertad. Asimismo, está afectando la actividad económica, poniendo en riesgo miles de empleos y frenando inversiones clave para el desarrollo de Chile”, señala el texto suscrito por todas las ramas de la patronal.
“No hay progreso posible en un país donde el miedo impide el normal funcionamiento de la sociedad”, enfatizó la multigremial en otro pasaje de su declaración.
En este contexto, la CPC dijo que “es momento de actuar con decisión para recuperar la paz y la tranquilidad que hemos perdido” y formuló un “llamado firme y directo a las autoridades a asumir su responsabilidad con determinación, priorizando la seguridad de todos los chilenos”.
2. Una ceremonia que no fue
La invitación estaba cursada. El gobierno tenía programado promulgar hoy la reforma de pensiones aprobada por el Congreso con una simbólica ceremonia en Pedro Aguirre Cerda y la apuesta era contar con la presencia de los partidos de Chile Vamos, cuyos parlamentarios dieron sus votos para hacer realidad el proyecto emblema del Presidente Boric.
La coalición de centroderecha, sin embargo, dijo “No”. Y la actividad se canceló (o se pospuso, según informó el Ejecutivo).
Entre otras razones, la negativa de Chile Vamos se explicaba porque una de las protagonistas del hito sería, sin duda, la ministra del Trabajo, Jeannette Jara, inminente candidata presidencial del Partido Comunista.
3. Una nueva ofensiva contra Cariola
Una nueva arremetida que busca destituirla de la presidencia de la Cámara podría tener que volver a enfrentar la diputada Karol Cariola, en el marco de la indagatoria que lleva a cabo la fiscalía en su contra por un eventual caso de tráfico de influencias.
Si bien la parlamentaria comunista salió airosa de la moción de censura presentada por el Partido Social Cristiano y que se votó el martes en el Congreso, ahora Chile Vamos la emplazó a renunciar a su cargo en la testera de la corporación ante el surgimiento de nuevos antecedentes en la causa.
En caso contrario, parlamentarios de la UDI, RN y Evópoli anunciaron que promoverán una nueva moción de censura. “No hay margen” para su continuidad en la mesa, dijeron.
La nueva arremetida coincide con que ayer el 7° Juzgado de Garantía de Santiago validara la diligencia ordenada por la fiscalía para incautar el teléfono celular de la parlamentaria, procedimiento que había sido objetado por su defensa alegando una vulneración de sus derechos.
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