¿Qué es la isoterma cero y cómo afecta a la lluvia?
En relación a la Alerta Temprana Preventiva por lluvias emitida esta semana en la Región Metropolitana, se pronostica una elevada isoterma cero.
A medida que nos acercamos al final del mes, la capital comienza a manifestar los primeros signos del invierno. Una evidencia de ello son las fuertes y abundantes precipitaciones que han ocurrido hoy, jueves 22 de junio.
En relación a esta predicción de precipitaciones, el Servicio Nacional de Prevención y Desastres (Senapred) mantiene Alerta Temprana Preventiva para la Región Metropolitana.
Además, la Dirección Meteorológica de Chile mantiene un aviso por lluvias normales a moderadas en la precordillera y cordillera, con una isoterma cero elevada, desde la mañana del día de hoy jueves 22 hasta la tarde del sábado 24 de junio.
Por otro lado, una alerta meteorológica advierte de lluvias moderadas a fuertes en la cordillera, también con isoterma cero alta, desde la mañana del jueves 22 hasta la tarde del viernes 23 de junio.
¿Qué es una isoterma cero?
Según la definición de la Dirección Meteorológica de Chile (DMC), la isoterma cero se refiere a la línea imaginaria en la cual la temperatura del aire llega a los 0 grados.
¿Qué significa la isoterma cero en la lluvia?
En el estudio del clima y las condiciones atmosféricas, la isoterma cero es un concepto fundamental que permite comprender y predecir la formación de precipitaciones.
Acorde a la información entregada por la DMC, la isoterma cero juega un papel crucial en el análisis de las lluvias, ya que su posición vertical determina si la precipitación caerá en forma de lluvia o de nieve.
Cuando la isoterma cero se encuentra por encima de la superficie terrestre, las gotas de lluvia no tienen oportunidad de congelarse y, por lo tanto, las precipitaciones serán líquidas. Por el contrario, cuando la isoterma cero está por debajo de la superficie, las gotas de lluvia pueden congelarse y caer en forma de nieve.
La presencia de una isoterma cero elevada conlleva riesgos, ya que se produce lluvia en áreas donde normalmente cae nieve. Esto implica que las precipitaciones en forma líquida pueden desencadenar aluviones en las zonas altas de la cordillera.
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