5 formas para tomar más agua, en especial si no te gusta la de llave
Aunque las bebidas son las favoritas de muchos, el agua es la mejor alternativa para una correcta hidratación. No obstante, el agua potable puede tener un mal sabor y desalentar su consumo.
¿Tomar una lata de Coca-Cola o un vaso de agua? La respuesta para muchas personas es clara: la bebida tiene más sabor y puede sentirse más refrescante. No obstante, la opción más saludable y responsable con el cuerpo siempre será el agua.
Y es que, según la ciencia, puede ser normal que algunos adultos ya no encuentren atractivo el sabor del agua y que, incluso, la sensación de sed disminuya con la edad.
Además, el agua de la llave puede ser desagradable para muchos, en especial por su olor y sabor a raíz de los componentes que tiene.
No obstante, la correcta hidratación es muy importante para una buena salud. Por ello, un grupo de expertos y la dietista y nutricionista Amy Keating compartieron en The Washington Post sus mejores consejos para que el agua sea más fácil y atractiva para beber.
1. Probar una jarra con filtro de agua
El agua potable (que sale del grifo) puede tener un mal sabor y olor, en comparación al agua purificada. No obstante, en el mercado existen filtros de agua en distintos formatos —el más común y fácil de utilizar podría ser una jarra con filtro— que mejoran el sabor y olor del agua, además de eliminar los contaminantes, como el cloro y plomo.
2. Considerar una renovación
Si quieres ir un paso más allá, los expertos también recomiendan un filtro de agua que se instala en el lavaplatos o lavamanos.
Aunque hay que hacer un trabajo más complicado, se supone que estos filtros adheridos mejoran el sabor y el olor ligeramente mejor que los filtros de las jarras de agua.
3. Añadir sabor al agua
Si simplemente no te gusta el sabor del agua, una buena idea podría ser cambiarlo con un poco de jugo (que sea 100% fruta) o alguna hierba favorita, en forma de infusión.
Por ejemplo, puedes añadir cualquier cítrico, pepino, frutos del bosque, melones, albahaca o menta.
4. Tomar agua caliente o tibia
A muchas personas no les agrada que la temperatura del agua esté fría, por lo que prefieren calentarla un poco en el hervidor, microondas o, incluso, en una olla en la cocina.
5. Tomar agua con gas
Esa sensación burbujeante de las bebidas, también puede añadirse al agua. El agua con gas es una alternativa muy buena, pues aporta una correcta hidratación, pero sin los aditivos y azúcares que pueden contener las bebidas.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.