Cada vez que los peatones caminan en una calle muy concurrida están constantemente evitando colisionar con personas que avanzan en sentido contrario. Antes de que un encuentro termine en choque, el peatón decide - inconscientemente - cambiar su ruta para evitar chocar con otro.
Físicos de la Eindhoven University of Technology en colaboración con investigadores de Estados Unidos e Italia, analizaron 5 millones de movimientos de peatones en la estación de trenes Eindhoven, en los Países Bajos. Gracias a la investigación, los expertos descubrieron que a las personas les gusta mantener -en promedio - una distancia de al menos 75 centímetros.
De todos los datos que lograron recopilar, cerca de 9 mil pares de peatones no cambiaron su curso.
"Cerca de 40 pares de personas chocaron entre ellos. Las parejas que quedaron adaptaron su caminar hasta que lograron estar al menos 140 centímetros de distancia para así prevenir una colisión", indicó Alessandro Corbetta, postdoctor y co-autor del estudio.
Utilizando toda la información, los expertos desarrollaron un modelo en donde por medio de estadísticas, lograron predecir de manera muy precisa el movimiento de los peatones. Por ejemplo, son capaces de saber quiénes, de un grupo de mil personas, correrán, caminarán, esquivarán, se darán la vuelta o colisionarán cuando se vean enfrentados en un corredor o túnel.
"Vimos en nuestros datos que cerca de 1 en mil personas se detenía e invertía su trayectoria para salir del túnel o corredor del mismo lado que entraron. Incluso si caminaban solos e independiente de su motivación (...) Realizar estos experimentos en la vida real por tanto es importante para ampliar nuestro entendimiento. Nunca se podrían haber medido estas características en un experimento de laboratorio en donde a los participantes se les pide ejecutar una acción", indicó el profesor Federico Toschi, otro coautor del estudio.
De acuerdo a los expertos, ahora esperan estudiar a peatones y su comportamiento frente a dos salidas - izquierda o derecha - si ambas están iluminadas con luces con distinta intensidad. Dependiendo de los resultados, explican, podrían confirmar si es que existe una forma de dirigir a las personas de manera inconsciente. También esperan estudiar el comportamiento de escolares que tienen que caminar en grupo por la entrada del colegio.
La investigación fue publicada hoy en la revista Physical Review E.
Fuente: Eindhoven University of Technology.