¿Cómo entender lo que expresan los gatos para mejorar su bienestar? Esto dice un experto

Para los amantes de los animales, los gatos son de las criaturas favoritas para mantener en el hogar. No solo porque se caracterizan por ser independientes y extremadamente limpios, sino que también, porque compartir con ellos es un ritual que trae múltiples beneficios tanto para la salud mental como física.

A inicios de este año, el médico veterinario y conferencista internacional, Juan Enrique Romero, publicó un artículo en Infobae en el que detalló que pasar tiempo con los michis ayuda a tener una mejor autoestima y a reducir el estrés, entre múltiples otros beneficios.

Y si bien, los felinos destacan por ser juguetones y por acostarse con sus humanos para pasar momentos de tranquilidad, existen rumores que dicen que tienden a ser ariscos, distintantes y “traicioneros”.

Probablemente, muchas de las personas que replican eso sobre ellos nunca han compartido directamente con uno. Según escribió Romero en un artículo publicado esta semana en el citado medio, “han sido injustamente tildados” con tales calificativos.

“Muchos conocen a los gatos como animales fríos en comparación con los amigos caninos. En el caso de estos últimos, sus expresiones emocionales son externalizadas de manera directa y precisa. Pero los gatos comunican mucho más de lo que se cree”.

El especialista destacó que a pesar de que ambas especies son comunes en los hogares, estas tienen grandes diferencias en sus métodos de expresión, por lo que interpretarlas de igual forma abre espacio para que se saquen conclusiones erróneas, en relación a lo que quieren manifestar.

Respecto a los felinos, dijo que “son animales con un complejo y completo repertorio de comunicaciones tanto visual, como auditiva, olfativa y táctil”, lo que va mucho más allá de presumir que están enojados cuando mueven su cola enérgicamente.

Bajo esta línea, Romero compartió una serie de aspectos a tener en cuenta para comprender a los michis y así mejorar la comunicación que se tiene con ellos.

El veterinario explicó que si un felino “se muestra con la espalda arqueada con el pelo erizado, con las patas traseras más elevadas, y con la cola envuelta alrededor de su cuerpo, está advirtiendo de que se siente muy incómodo y con miedo”.

Tales expresiones también son visibles cuando ponen sus orejas pegadas a su cabeza y evitan el contacto visual.

Cuando se sienten amenazados frente a un factor en específico, tienden a observar fijamente hacia ese punto.

“En ambos casos, las pupilas están dilatadas y puede llegar a mostrar los colmillos y las garras. Por otra parte, un gato que está interesado en algo posicionará las orejas hacia adelante y mostrará una mirada relajada”, añadió Romero.

Respecto a la cola, detalló que “si la mueven con movimientos cortos, como si fuera un látigo, están advirtiendo una situación que no les está gustando”, mientras que si la posicionan entre sus patas traseras o la enrollan en su cuerpo, quieren decir que están incómodos o que sienten temor.

Si están pasando por un momento de mucho miedo o se están posicionando para atacar, esta suele ponerse “esponjosa”, es decir, hacia arriba y con los pelos erizados.

En contraposición a tales escenarios, si se sienten cómodos y relajados, la punta de su cola se direcciona hacia abajo y los movimientos tienden a ser lentos y delicados.

Para Romero, es clave que se consideren estos factores a la hora de interactuar con los gatos, ya que tratar de comprender lo que quieren comunicar mejorará la relación que se tiene con ellos y hará que incremente su bienestar y mejoren su condiciones de salud.