Lo que antes invertían en seguridad para protegerse de las pandillas, ahora pueden destinarlo a hacer crecer sus negocios. Nayib Bukele, presidente de El Salvador, instauró un régimen de excepción que logró que su país pasara a ser uno de los más vulnerables de Latinoamérica, a encabezar la lista de los más seguros.

De los 4.000 homicidios que se registraron en 2017, ya no quedan rastros. Este 2024, en los primeros meses, solo se registraron 80.

Sin duda, la percepción de estar más protegido y seguro rige en la sociedad salvadoreña. Por esto, se estaría generando un ambiente más propicio para que su economía crezca.

Y con el término de las pandillas, la próxima meta de Bukele es “que el mundo vea a El Salvador más por su milagro económico, que por su milagro en seguridad”.

Cómo es el “milagro económico” que Bukele quiere instaurar en El Salvador. Foto: REUTERS.

Una mejor economía: el resultado de la lucha contra las pandillas

“Muchas grandes empresas alemanas se vieron obligadas a abandonar el país debido a la mala situación de seguridad”, le dijo Karla Klaus, de la Cámara de Comercio Alemana-Salvadoreña a Deutsche Welle.

Y es que antes de la intervención de Nayib Bukele, los empresarios —en especial las pequeñas y medianas empresas— le temían a las pandillas, como la Mara Salvatrucha (MS-13) y Barrio 18, y debían usar parte de su capital para protegerse de ellas.

Sin embargo, desde que inició el estado de excepción en el año 2022, hasta ahora, se han encerrado a más de 80.000 pandilleros, según las cifras del mismo gobierno.

El problema es que, según denunciaron organizaciones no gubernamentales y medios de comunicación independientes, entre esos miles de prisioneros hay inocentes que, sin pruebas ni sentencia, han sido encerrados.

Cómo es el “milagro económico” que Bukele quiere instaurar en El Salvador. Foto: REUTERS.

Además, el régimen de excepción contempla la renuncia a derechos básicos fundamentales, como la suspensión del derecho a la defensa, inviolabilidad de las comunicaciones y el plazo máximo de detención provisional.

Pese a ello, un fenómeno extraño ocurre en El Salvador: la población está más “contenta” y, según una encuesta de la Cámara de Comercio Alemana-Salvadoreña que consultó a 150 empresas asociadas, la confianza con el país ahora es “mucho mayor”.

“Numerosas empresas se plantean ahora invertir en el suministro de energías renovables, en la modernización de maquinaria y también hay planes para contratar nuevo personal”, le dijo Klaus a DW.

Hace tan solo unos meses, el gigante Google abrió por primera vez una sede en la capital, San Salvador, porque quiere colaborar en la digitalización y modernización del país centroamericano, ahora que no es necesario mirar por el hombro antes de invertir.

Cómo Bukele pretende mejorar la economía de El Salvador

Con el ambiente listo para poder prosperar y salir de las altas deudas que sostiene, Bukele ha comenzado a dar algunos pasos para “mejorar” el país. Según relató el medio DW, comenzó con el centro de la ciudad de San Salvador: la Biblioteca Nacional de El Salvador.

Se trata de un edificio de cristal “de aspecto futurista” que está al lado del palacio presidencial, un espacio que el gobierno salvadoreño ha abierto para que funcione como un punto de encuentro para las familias, quienes pueden ir a leer, jugar y compartir en eventos culturales que organizan semanalmente.

Cómo es el “milagro económico” que Bukele quiere instaurar en El Salvador

Y China es el protagonista de la mejora. El proyecto, que pretende modernizar todo el centro histórico de la capital, está a cargo de la inversión de empresarios asiáticos, una transformación que, más adelante, Bukele quiere que llegue al resto del país.

Junto con ello, el mandatario salvadoreño también estaría impulsando el turismo. Uno de los proyectos que están armando fue bautizado como Surf City II, que busca llevar a las playas salvadoreñas a los entusiastas de los deportes acuáticos.

Para ello, está en los planes construir un segundo aeropuerto, atraer inversores para que construyan hoteles y, así, llamar a turistas del occidente y Estados Unidos para convertir al país en una “escena internacional del surf”.

El Estado pretende invertir 100 millones de dólares en infraestructura.

El gran pero es la destrucción de entornos naturales, que son únicos en Centroamérica.

La experta de Adveniat, organización de ayuda latinoamericana, Ines Klissenbauer, le dijo a DW que “el daño ecológico de este proyecto puede ser tan grande, que no sea posible una implementación sostenible”.

Hace dos años, el mandatario decía que “tenemos aquí una de las playas más impresionantes del país, una zona que ha sido abandonada por todos los Gobiernos anteriores (...) Los expertos dicen que es una de las mejores playas para surfear”.

Pero, sin duda, la estrategia más controvertida de Bukele es la del bitcoin: el suyo fue el primer estado en comprar bitcoin como activo del tesoro y en emitir bonos respaldados por esta moneda.

Cómo es el “milagro económico” que Bukele quiere instaurar en El Salvador. Foto: REUTERS.

Para Claudia Ortiz, política opositora del partido socialdemócrata Vamos, la situación es preocupante e incierta: “El bitcoin forma parte de un proyecto autoritario y de un sistema en el que los fondos públicos se utilizan a discreción y sin ninguna transparencia”.

“Los problemas económicos de El Salvador y las necesidades económicas de la población no se resolverán haciendo del bitcoin una moneda de curso legal”, criticó.

Mientras tanto, Bukele ha enfatizado que en la actualidad, las empresas de Wall Street ofrecen productos de inversión vinculados al bitcoin y que El Salvador tiene cerca de 400 millones de dólares americanos en bitcoin “solo en la billetera pública”.