Cómo sería Strawberry, la nueva IA de OpenAI que puede “pensar” (y qué pasará con ChatGPT)
Después de acceder a una serie de documentos secretos, un medio encontró el proyecto Strawberry, una nueva Inteligencia Artificial de OpenAI, creadora de ChatGPT, que “piensa” antes de responder a los humanos. Su lanzamiento sería en dos semanas.
Una Inteligencia Artificial que “piensa” antes de responder. Así sería Strawberry, la supuesta nueva IA que lanzará OpenAI —empresa madre de ChatGPT— y que revolucionará una vez más esta tecnología, con una herramienta al alcance de cualquier persona.
Los “rumores” de este nuevo modelo de IA son fuertes: los medios The Information y Reuters, publicaron que en las próximas dos semanas, la empresa de tecnología lanzaría Strawberry, un chatbot que esta vez tendrá la capacidad de “razonar” antes de contestar a nuestras preguntas.
Así, dos años después del vertiginoso cambio que ocasionó ChatGPT —lanzado en noviembre de 2022— en la humanidad y la forma de interactuar con esta tecnología, todo apunta a que OpenAI planea sorprender al mundo con un nuevo sistema que ninguna otra empresa ha explorado hasta ahora.
Sin embargo, esta vez no será gratis.
Además, algunos se han preguntado, ¿qué pasará con ChatGPT?
Esto es todo lo que se sabe de Strawberry de OpenAI, hasta ahora.
Qué es Strawberry, la supuesta nueva IA de OpenAI
Este nuevo modelo de Inteligencia Artificial, bautizado como Strawberry, no reemplazará a ChatGPT, sino que se integrará de una forma independiente.
Strawberry se sumaría a las grandes mejoras que ha implementado OpenAI con ChatGPT: según explicaron desde el medio especializado en tecnología, Xataka, la firma ya había anunciado “un prometedor modo de voz que nos recuerda al futuro que plantea la película Her”.
La diferencia que haría Strawberry es que, en comparación al ChatGPT convencional, este nuevo sistema podría “pensar” antes de responder cualquier pregunta.
No obstante, el concepto exacto de cómo “pensará” esta IA todavía permanece como un secreto bien guardado por OpenAI.
Aún así, Reuters tuvo acceso a unos documentos internos de la marca donde descubrió el nombre de Strawberry, a mediados de este año 2024, y un par de fuentes anónimas relacionadas a la compañía confirmó que, efectivamente, existe este codicioso proyecto que tendrá una “gran capacidad”.
Según estas mismas fuentes, la IA Strawberry podrá “razonar y navegar” de forma autónoma por Internet para poder elaborar respuestas más completas y precisas. A esto, supuestamente le habrían llamado “deep search” de forma interna, aseguraron en el mismo medio.
Es decir, Strawberry podría ser una especie de “asistente” que puede ayudarnos con búsquedas más complejas, comparando resultados y encontrando respuestas completas, algo que solemos hacer manualmente cuando buscamos algo específico en la web.
Las respuestas tardarían entre 10 y 20 segundos, tiempo en el que la IA haría una “investigación profunda”, consultando fuentes actuales de Internet. Esto podría no ser cómodo para quienes buscan una respuesta más rápida, pero sí para quienes están investigando algo con más detalle.
Según The Information, Strawberry llegará antes de lo que se creía: aunque esta información no ha sido oficializada por OpenAI, el medio aseguró que el lanzamiento de esta herramienta será “en las próximas dos semanas”.
Además, Xataka añadió que es posible que, al ser un servicio independiente de ChatGPT, se pueda acceder a él en un menú desplegable de ChatGPT.
Lo que sí, es que The Information adelantó que Strawberry podría tener un precio costoso, incluso más que ChatGPT, y que podría estar disponible como una “suscripción anual”.
“¿Cuánto estaría dispuesto a pagar por ChatGPT cada mes? ¿50 dólares? ¿75 dólares? ¿Qué tal 200 o 2.000 dólares?”, se preguntó el medio en un artículo.
Según habrían escuchado sus periodistas, los ejecutivos de OpenAI “han hablado de suscripciones de alto precio para los próximos modelos de lenguaje de gran tamaño, como Strawberry, centrado en el razonamiento, y un nuevo modelo insignia de LLM, denominado Orion”.
“La cantidad que los clientes están dispuestos a pagar por el chatbot de IA es importante no solo para OpenAI, sino también para los rivales que ofrecen productos similares, incluidos Google, Anthropic y otros”, escribieron en el medio.
De hecho, en las primeras discusiones internas en OpenAI, una “persona con conocimiento directo de las cifras” le dijo a The Information que se habrían considerado precios de suscripción de hasta 2.000 dólares por mes (cerca de 1.900.000 pesos chilenos).
Aún así, el medio declaró tener “serias dudas de que el precio final sea tan alto”.
Por otra parte, con Strawberry, OpenAI continuaría en la delantera de la vertiginosa carrera de la Inteligencia Artificial, que cada vez se pone más competitiva. Algunas empresas, como Google, continúan trabajando en modelos de lenguaje colosales, por lo que este nuevo sistema podría ser una de las muchas sorpresas que le deparan a la humanidad en estos años.
Hace algunos meses, Brad Lightcap, director de operaciones de OpenAI, adelantó, en conversación con Financial Times, que la empresa ya está buscando crear herramientas de IA que sean más complejas y puedan resolver “problemas más difíciles” con el razonamiento.
“Vamos a empezar a ver que la IA puede asumir tareas más complejas de una manera más sofisticada. Apenas estamos empezando a arañar la superficie de la capacidad que tienen estos modelos para razonar”, declaró.
En esta línea, según el medio Wired, los analistas esperan que las supuestas capacidades de razonamiento que tendría Strawberry “marcarán el próximo gran avance de la IA”.
Y es que, por primera vez, la tecnología podrá “realizar juicios, razonar, comunicarse en lenguaje natural y aprender de su entorno”.
Pero, para otros expertos, esto podría ser también un arma de doble filo, pues todavía existe un temor latente de que la IA pueda sobrepasar a los humanos y “revelarse”, o que esta tecnología sea utilizada por personas malintencionadas.
Noah Goodman, académico de la Universidad de Stanford, le dijo al mismo medio que este nuevo avance “es emocionante y aterrador a la vez. Si las cosas siguen en esa dirección, como humanos tendremos algunas cuestiones serias que pensar”.
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