Memory Loss concept
Fotografía por: Warchi.

Consumir alcohol en exceso podría promover el Alzheimer, según estudio científico

Una reciente investigación plantea que el alto consumo de bebidas alcohólicas impulsa “la aparición de deficiencias en el aprendizaje espacial y la memoria”.


Beber alcohol en exceso puede causar múltiples efectos nocivos en las personas. De acuerdo a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), a largo plazo aquello conduce a una serie de problemas de salud como enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares, hipertensión, problemas digestivos, enfermedad del hígado, cáncer de mama, boca, garganta, entre otros.

Pero además de esas afecciones, esta práctica también provoca problemas en el cerebro de los consumidores. Específicamente, científicos han concluido que el alcohol tiene un vínculo con la progresión de la enfermedad de Alzheimer.

Según una reciente investigación publicada en la revista ENeuro, el alto consumo de sustancias alcohólicas pueden impulsar el deterioro cognitivo y las firmas de expresión génica en torno a la enfermedad neurodegenerativa.

Uno de los obstáculos con respecto al alcohol radica en que las personas no siempre se dan cuenta de que el consumo que presentan pasó los límites. Y es que beber en exceso no necesariamente significa hacerlo a cada momento del día y durante toda la semana.

alcohol
El consumo de alcohol reiterado puede impactar en la salud de las personas. Foto: Getty Images.

De acuerdo a CDC, en la práctica de beber en exceso también se incluyen “los atracones de alcohol, beber demasiado y cualquier consumo de alcohol por parte de mujeres embarazadas o personas menores de 21 años”.

Un atracón de alcohol, por ejemplo, significa tomar más de 4 copas en una sola ocasión si las consumidoras son mujeres, o 5 en el caso de los hombres. Mientras que el beber demasiado se comprende por tomar más 8 tragos a la semana si lo realizan las mujeres y 15 si lo hacen los hombres.

Consumo de alcohol: un factor de riesgo para el Alzheimer

De acuerdo a los autores del estudio, en la actualidad el Alzheimer es la enfermedad neurodegenerativa más frecuente en la población en todo el mundo. Ahí radica parte de la importancia de poder analizar los elementos que podrían promover su desarrollo.

Si bien los científicos estadounidenses e italianos plantean que se han realizado múltiples esfuerzos para poder determinar los “factores de riesgo ambientales y genéticos” que pueden ser determinantes en el surgimiento de este trastorno cerebral, también sugieren que hay otros que se han dejado de lado.

Y es que hasta ahora, indica el artículo, la influencia que tiene el alcohol en esta demencia ha sido poco explorada: “El alcohol ha recibido una atención limitada como factor de riesgo potencial para la enfermedad de Alzheimer”.

Por lo mismo, los autores del estudio decidieron indagar las consecuencias que aparecen cuando se mezcla un historial por intoxicación por alcohol “con la susceptibilidad genética a la enfermedad de Alzheimer sobre el rendimiento cognitivo y la expresión génica a nivel unicelular”. Para llevar a cabo el estudio, los expertos experimentaron con modelos de ratones.

Dementia
El Alzheimer es la enfermedad neurodegenerativa más común en la población.

“Descubrimos que un historial de intoxicación repetida por alcohol promueve la aparición de deficiencias en el aprendizaje espacial y la memoria en ratones presintomáticos transgénicos triples AD (3xTg-AD)”, expresaron.

Al mismo tiempo pudieron evidenciar que podía conducir a “cambios transcripcionales en la corteza prefrontal asociados con la progresión de la enfermedad de Alzheimer”.

A inicios de este año, un equipo de científicos de la Universidad Wake Forest (Estados Unidos) publicó un estudio en la revista Neurobiology of Disease donde también abordaban la relación que podría haber entre el alcohol y esta enfermedad neurodegenerativa.

La investigación llegó a la conclusión de que hasta las dosis “modestas” de alcohol podían estar relacionadas con la aceleración del Alzheimer, ya que promovían la pérdida de células cerebrales y el incremento de placas amiloides. También hallaron que beber moderadamente podía generar una alteración en la ansiedad y algunas conductas que se vinculan con la demencia.

“Estos hallazgos sugieren que el alcohol podría acelerar la cascada patológica de la enfermedad de Alzheimer en sus primeras etapas”, aseguró Shannon Macauley, una de las científicas del estudio.

Para la autora, esto significa que el consumo de alcohol puede ser un factor de riesgo modificable en el desarrollo de la enfermedad progresiva.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.