Cuáles son los trabajos que está creando la Inteligencia Artificial y cómo prepararse para ellos

La inteligencia artificial (IA) se ha convertido en una de las áreas más comentadas de la tecnología, debido a sus acelerados avances y a las capacidades que ofrece para realizar tareas con inmediatez.

Aquello ha despertado múltiples dudas sobre cómo cambiará el ámbito del trabajo, en cuanto a los empleos que podrían dejar de requerir humanos y, por supuesto, los nuevos que se están creando.

La CEO de Singularity Experts, Elena Ibáñez, quien dirige la firma de asesoría laboral, aseguró recientemente a la BBC que “muchos estudios que dicen que la IA está creando más de los que destruye”.

A ello se le suma que “está haciendo evolucionar profesionales tradicionales en absolutamente todos los sectores”.

Es por esto que la especialista considera necesario pensar en cuáles son las nuevas oportunidades que puede presentar la IA.

Francisco Scaserra, quien es el líder de Tecnología en Argentina de la empresa de reclutamiento de personal, Michael Page, concordó con Ibáñez y manifestó que “no es que la inteligencia artificial viene a destruir empleos”.

“El gran desafío es hacer que las posiciones que ya existen evolucionen para tener un valor agregado diferente y no se queden con la transaccionalidad. De ella se puede encargar la IA”, enfatizó.

Por su parte, la economista de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Janine Berg, precisó al citado medio que “se trata de incorporar esta tecnología para hacernos más eficientes y para ayudarnos a hacer nuestro trabajo”.

Pese a que no se puede saber con exactitud cómo van a ser los nuevos puestos que aparecerán en el futuro, la especialista destacó que hay que “ser conscientes de que en el mercado laboral los empleadores van a estar buscando a personas que usen la IA como una herramienta”, para así mejorar su productividad.

A continuación encontrarás algunos trabajos que está creando la inteligencia artificial, los cuales fueron mencionados por los expertos que consultó la BBC.

Para que la IA generativa sea capaz de entregar resultados —como por ejemplo, textos o imágenes— a partir de las directrices que le dan los usuarios, es necesario que una persona se encargue de diseñar las peticiones o premisas. Y el encargado de hacerlo, es precisamente el ingeniero en prompts.

De él o ella dependerá que el sistema entregue mejores resultados, por lo que la precisión y el contexto son aspectos esenciales en sus funciones.

El Foro Económico Mundial incluyó este puesto entre los “tres empleos nuevos y emergentes”. Y medios especializados como Business Insider y Forbes lo han calificado como uno de los más llamativos en cuanto a la IA generativa.

Según un artículo que la revista Time publicó en abril, para hacerlo no se requiere estrictamente de “un título de ingeniería informática, ni siquiera habilidades avanzadas de programación”.

En cambio, los especialistas consultados por la BBC detallaron que lo más importante es tener habilidades como el pensamiento crítico, el análisis de datos y la creatividad.

Sin embargo, varios de los empleadores suelen pedir el manejo de lenguajes de programación como Python y TensorFlow, entre otros.

El editor de BBC Future, Richard Fischer, declaró que “se dice que si eres bueno en ingeniería de prompt, podrías evitar ser reemplazado por la IA, e incluso podrías aspirar a un salario alto. Aunque aún queda por ver si ese seguirá siendo el caso”.

Su trabajo consiste, básicamente, en encontrar formas de usar la inteligencia artificial para resolver problemas dentro de una organización o empresa.

Un artículo académico de la Universidad de Leeds (Reino Unido) describió sus funciones más precisamente como “comprender grandes conjuntos de datos y convertir ese aprendizaje en ideas y planes para desarrollar nuevas tecnologías de IA que los científicos de datos materializarán”.

El perfil de quienes se desempeñan en esta área involucra desde habilidades blandas hasta otras más técnicas, ya que debe reunir una amplia cantidad de propuestas para buscar nuevos enfoques.

Desde la visión de Ibáñez, la CEO de Singularity Experts, las áreas de conocimiento más fuertes de estos trabajadores deben ser la ingeniería en software, los negocios y la estadística.

Es una persona que conoce sobre modelos lingüísticos y opera con los desarrolladores de software en las áreas de procesamiento del lenguaje. Esta es un área más ligada a carreras humanistas, en el que habitualmente se pide contar con un título de filología (el estudio de los textos escritos), traducción, interpretación, psicología o filosofía, entre otros.

Aún así, una especialización adicional en torno a este ámbito, pero llevado a la tecnología, puede ayudar a los candidatos a conseguir un puesto laboral.

Entre las funciones que realizan, de forma más concreta, se encuentra que buscan traducir la lógica del lenguaje escrito y hablado a los sistemas, para que así estos puedan ser entrenados con el objetivo de efectuar tareas.

El principal deber de quien tiene este puesto es gestionar programas que hacen tareas repetitivas y manuales. Según contó Ibáñez a la BBC, para hacerlo se debe contar con conocimientos de programación y otros más especializados dentro de esta área en particular, la cual es llamada RPA por sus siglas en inglés.

“Beneficia a su negocio al automatizar varias actividades, incluida la transferencia de datos, la actualización de perfiles de clientes, la entrada de datos, la gestión de inventario y otras tareas más complejas”, detalló Microsoft en una nota de su página web.

Junto con ello, desde el gigante de la tecnología manifestaron que la implementación de RPA tiene una relación directa con aumentos de productividad.

Su deber es revisar los algoritmos de los sistemas para verificar que no haya sesgos por factores como el género, edad o etnia. Asimismo, la CEO de Singularity Experts dijo que tanto los trabajadores con un perfil más informático como los con uno más humanista pueden ser seleccionados.

Lo que sí, es clave que tengan conocimientos de ética, ya que deben ser conscientes sobre cómo los efectos de sus labores afectan a las personas.

El objetivo es que los algoritmos que desarrollen junto a sus colegas “sean transparentes, justos y explicables”.

La académica de la escuela de Derecho de la Universidad de Reading en Inglaterra, Mathilde Pavis, explicó a la BBC que para los equipos de todo tipo de organización que produzcan o usen tecnología, “es importante que tengas a tu lado a abogados y especialistas en ética que sepan de inteligencia artificial”.

Aquello, según la experta, favorece a que las operaciones se mantengan con el paso del tiempo y a que se aborden las aristas tanto legales como éticas desde una perspectiva amplia.

Además, es clave para analizar la presencia de potenciales riesgos, como por ejemplo, que se use la tecnología para fines dañinos o adversos, tales como difundir información falsa o modificar datos de forma ilegítima o ilegal.

Para Pavis, las dos áreas del derecho fundamentales en este campo son la comercial (que incluye lo relacionado a propiedad intelectual) y la penal (vinculada con la ciberseguridad).

“La IA oscila en ese espectro: es un producto con un gran potencial comercial y, al mismo tiempo, con un potencial para que se le dé un mal uso”.