Informe del CIIFEN: La Niña no se desarrolló según lo previsto
Los pronósticos se mantienen en un 70% de probabilidades para los próximos meses.
La Niña no se ha desarrollado tan rápido como se había previsto en los meses anteriores, pero los pronósticos mantienen en un 70% las probabilidades de que se presente entre agosto y octubre del 2024, dijo el Centro Internacional para la Investigación del Fenómeno de El Niño (CIIFEN).
Si bien a contar de mayo de 2024 se comenzaron a observar temperaturas más frías de lo normal en el Océano Pacífico central y oriental, la atmósfera aún se mantiene en umbrales neutrales, dijo el reporte del CIIFEN.
“La falta de acoplamiento de la atmósfera en estos últimos meses no permitió que las condiciones de La Niña se desarrollaran tan rápido como se pronosticaba en meses anteriores”, apunta el informe.
“Sin embargo, para el trimestre de agosto a octubre de 2024 se sigue pronosticando un 70% de probabilidades de desarrollo de La Niña”, agrega.
La llegada del fenómeno de La Niña
El fenómeno llamado El Niño-Oscilación Sur (ENOS) hace referencia a variaciones en las temperaturas del océano Pacífico, que consta de dos patrones o episodios opuestos, El Niño y La Niña y una fase neutra.
El patrón de La Niña se caracteriza por temperaturas inusualmente frías en el océano Pacífico ecuatorial y está relacionado con inundaciones y sequías.
El ciclo entre los patrones meteorológicos de El Niño y La Niña —que pueden generar incendios forestales, ciclones tropicales y sequías prolongadas— es vital para los agricultores de todo el mundo.
En América Latina, han afectado a cultivos como el trigo, la soja y el maíz, perjudicando a economías regionales a menudo muy dependientes de la agricultura.
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