La aterradora razón por la que una exagente del FBI solo se hospeda en el tercer piso de hoteles
Después de un viaje clasificado donde su seguridad se vio comprometida, la exagente de la CIA y FBI comenzó a implementar medidas de cuidado en el extranjero.
Después de su experiencia trabajando como agente especial de la Agencia Central de Inteligencia (CIA por sus siglas en inglés) y el FBI, Tracy Walder (44) tuvo que aprender cómo mantenerse segura en sus misiones en el extranjero.
La mujer comenzó a implementar trucos de seguridad, después de un viaje clasificado donde se sintió muy expuesta y en peligro: “Obviamente no puedo ser extremadamente específica, ya que es clasificado, pero en términos generales, estaba en otro país espiándolos, así que tuve que asumir que el otro país tal vez sabía quién soy y estaba tratando de hacerme daño”.
Aunque era una situación extrema, se dio cuenta que su método podía implementarse no solamente trabajando como una agente secreta, sino también para cualquier persona que quiera viajar con seguridad a cualquier parte.
Consejos de una exagente del FBI para viajar con seguridad
Antes de viajar a un país extranjero, Walder investiga el área en busca de posibles amenazas y configura en su celular una aplicación que alerta a sus contactos, que les envía su ubicación, en caso de emergencia.
Cuando se aloja en hoteles, su habitación debe estar situada sí o sí entre el tercer y sexto piso: de esta manera, está lo suficientemente abajo para tener un acceso de emergencia, pero también suficientemente arriba para evitar que algún intruso pueda entrar.
“Cuando se trata del nivel del piso, hay dos cosas: la primera es entrar. Normalmente, alguien que intenta hacer daño irá por el camino más fácil que pueda y ese sería entrar por el primer piso, ya que es el más accesible. Sin embargo, si estás demasiado alto, en el piso 20 o 21, te resultará muy difícil salir rápidamente”, explicó.
Adicionalmente, siempre utiliza cerraduras de seguridad en las puertas y un tope de puerta, pues el personal tiene fácil acceso a las habitaciones, lo que, para ella, es un riesgo.
Los AirTags —los dispositivos rastreadores de Apple— nunca faltan en sus viajes: los pone en su equipaje, pero también hace que su hija de ocho años los utilice en forma de pulsera, como medida de prevención.
Además, la exagente aseguró que nunca se alojaría en un departamento privado, como un AirBnb, pues para ella, son lugares de alto riesgo. “Los encuentro extremadamente peligrosos y arriesgados. Estás poniendo tu confianza en alguien que no conoces, para que se quede en su casa”, dijo.
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