Marte: la misión InSight de la Nasa reveló de qué está compuesto el núcleo del planeta rojo
Tras analizar una serie de datos sísmicos reunidos por la sonda InSight de la Nasa, un grupo de científicos descubrió de qué está hecho el núcleo de Marte.
Esta semana, un grupo de científicos reveló importantes hallazgos de la sonda espacial InSight de la Nasa durante sus operaciones en el territorio de Marte.
Si bien, el robot llegó al planeta rojo a finales de 2018 y dejó de prestar servicios en diciembre de 2022, los especialistas todavía siguen analizando la amplia cantidad de información que este pudo obtener en esos cuatro años.
La misión tenía el objetivo de analizar las capas del interior de Marte, para así conocer más sobre su composición y compararla con la de la Tierra y otros planetas.
En medio de esa búsqueda y tras revisar una inmensa cantidad de datos, los científicos descubrieron cómo es su núcleo, un factor al que pudieron llegar principalmente a través del estudio de los temblores marcianos y la caída de un meteorito.
El artículo que reúne sus conclusiones fue publicado en la revista académica Proceedings of the National Academy of Sciences (PNA).
“Usamos los tiempos de viaje de las ondas sísmicas que transitan por el núcleo, en relación con las que permanecen en el manto, para restringir las propiedades del núcleo y construir los primeros modelos de las propiedades elásticas de todo el planeta”, declararon los expertos.
La misión InSight de la Nasa y su descubrimiento sobre el núcleo de Marte
Con los datos que reunieron en su análisis, determinaron que el corazón del planeta rojo está compuesto por una aleación de hierro líquido, con altos porcentajes de sulfuro y oxígeno, además de cantidades más pequeñas de carbono e hidrógeno, según rescató Infobae.
Aquello es distinto al caso de la Tierra, ya que nuestro planeta combina uno externo líquido con uno interno que es sólido.
De la misma manera, los investigadores pudieron deducir que el núcleo de Marte es más pequeño y denso de lo que se pensaba previamente, lo que también sugiere diferentes condiciones de formación.
Según explicó la autora principal del artículo y científica de la Universidad de Bristol, Jessica Irving, los temblores fueron fundamentales para sacar estas conclusiones.
“Necesitábamos suerte y habilidad para encontrar y luego usar estos terremotos. Los terremotos del lado lejano son intrínsecamente más difíciles de detectar porque una gran cantidad de energía se pierde o se desvía a medida que las ondas sísmicas viajan a través del planeta”, explicó.
Por su parte, el geólogo y parte de los coautores del artículo, Nicholas Schmerr, destacó que “las propiedades del núcleo de un planeta pueden servir como un resumen de cómo se formó y evolucionó dinámicamente con el tiempo”.
“La singularidad del núcleo de la Tierra le permite generar un campo magnético que nos protege de los vientos solares, permitiéndonos conservar el agua. El núcleo de Marte no genera este escudo protector, por lo que las condiciones de su superficie son hostiles para la vida”, añadió.
Otro coautor del análisis, Vedran Lekic, celebró que “más de 100 años después (del descubrimiento del núcleo de la Tierra en 1906), estamos aplicando nuestros conocimientos de las ondas sísmicas en Marte”.
En este sentido enfatizó: “Con InSight, finalmente estamos descubriendo qué hay en el centro de Marte y qué hace que sea tan similar, pero distinto de nuestro planeta”.
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