Hay tres razones por las que una enfermedad como el sarampión, que se eliminó del continente en 2016, puede volver a aparecer: debilidad en los planes de vacunación, cambios en la conducta de los individuos y la movilidad de las personas entre distintos países y continentes. Hoy estas tres situaciones están ocurriendo al mismo tiempo y son las que explican el aumento de casos.
Según el Boletín Semanal de Sarampión/Rubeola de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), a enero de este año América registraba solo dos casos, ambos en Venezuela. Desde entonces y hasta junio van 1.945, cifra que representa el 40% de los casi cinco mil casos que se anotaron en el período 2010 a 2015.
¿Qué pasó? Jeannette Dabanch, infectóloga y coordinadora del Comité de Enfermedades Emergentes de la Sociedad Chilena de Infectología, señala que pese a que el continente fue declarado libre de la enfermedad hace dos años, en el resto del mundo el virus seguía circulando e incluso creciendo en número de casos. En Europa, por ejemplo, la enfermedad generó varios brotes en países que tenían planes de inmunización, pero como las personas dejaron de vacunarse, el número de susceptibles comenzó a aumentar. En el caso de las Américas, al cambio de comportamiento se agrega el debilitamiento de las políticas sanitarias de Venezuela, país que tiene la mayor cantidad de casos y desde donde se ha expandido la enfermedad a Brasil. Otro factor es la migración y la gran cantidad de viajes que se realizan a lugares donde la enfermedad sigue presente.
En el Ministerio de Salud (Minsal) reconocen que estamos frente a una "situación inusual para las Américas". Por lo mismo, dicen, se alertó a los servicios de salud de todo el país para buscar activamente casos. "El caso de Perú y Argentina es esperable en el contexto de riesgo actual de sarampión en las Américas. A la fecha, no se han confirmado casos en Chile, manteniendo una vigilancia activa. En el 2015 nuestro país presentó un caso importado, que se logró controlar el brote en dos meses", señalan.
Respecto de los programas de inmunización, el Minsal dice que son bastante exitosos, y en el caso específico de sarampión se vacuna a la población infantil al año de edad y en 1º básico. "Las coberturas de vacuna SPR (sarampión, papera y rubéola) alcanzadas el 2017 al año de edad es de un 93,5% y en primero básico de un 90%, según información del Programa Nacional de Inmunizaciones. Los últimos estudios de seroprevalencia en población chilena (15 y 40 años) alcanzan un 89,5% para sarampión, lo que es un muy buen indicador de protección contra la enfermedad".
La representante de la OPS en Chile, Paloma Cuchí, explica que la declaración de continente "libre de" no significa que no se registren casos. "Algunos puedes ser importados, otros no. Lo importante es que como región y en todo el mundo lo que se busca es la erradicación, es decir que el virus no circule más, como ocurrió con la viruela. Hoy, pese a estos casos, seguimos teniendo eliminación del virus de sarampión en el continente. En los años 80 y antes teníamos más de un millón de casos al año. Ahora, entre 2010 y 2015 tuvimos solo 4.800 casos", dice.
Como región, indica Cuchí, existe una buena cobertura de vacunación, especialmente en Chile. "Los resultados dependen de una serie de factores. Lo principal es que las personas se vacunen, que haya vigilancia de cualquier caso detectado y sospechoso. Cuando algo falla, nos encontramos con problemas", dice.
La recomendación de la autoridad sanitaria es la vacunación a quienes viajen fuera del país y hayan nacido entre 1971 y 1978, quienes no estén seguros de tener las dos dosis de la vacuna o no sepan si tuvieron la enfermedad. También tienen que hacerlo los menores entre seis meses y un año y los niños que tengan entre 1 y 6 años, que solo tengan una dosis de la vacuna y que salgan de la frontera.
Venezuela
En el caso de Venezuela, señala la representante de OPS, los casos están relacionados con acceso a la vacuna. "La OPS está acompañando técnicamente a este país para respuesta a sus problemas sanitarios. Siempre que hay una situación en un país, lo primero que se afecta es la vacunación y las enfermedades infecciosas", indica Cuchí.