Oligospermia o conteo bajo de espermatozoides: principales causas y tratamiento

Cuando una pareja planea tener hijos y no logra un embarazo, lo más común es que ambos asistan al médico y, entre las causas, se puede encontrar el conteo bajo de espermatozoides.

Se trata de un padecimiento en el que el semen no tiene la cantidad de espermatozoides adecuada, lo que también se conoce como oligospermia.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el recuento se considera menor a lo normal cuando se tiene menos de 15 millones de espermatozoides por milímetro de semen. Lo anterior contrasta con los valores normales que van desde 15 a 200 millones.

Incluso, algunos hombres pueden no tener espermatozoides, lo que se conoce como azoospermia.

La oligospermia puede reducir las posibilidades de fecundación, aunque no se eliminan totalmente las posibilidades de ser padre.

Según se explica en el sitio de Clínica Mayo, la incapacidad de concebir un hijo es el síntoma principal del bajo conteo de espermatozoides, sin embargo, en algunos hombres pueden presentar otros signos como.

• Problemas con la función sexual como bajo deseo o disfunción eréctil.
• Dolor, hinchazón o un bulto en el área testicular.
• Disminución del vello facial o corporal.
• La oligospermia puede producirse por problemas en el hipotálamo o la hipófisis, órganos del cerebro que producen las hormonas necesarias para la producción de esperma. Además de eso, alteraciones en la forma y el movimiento de la misma también pueden ser la causa, la que a menudo es difícil de identificar.

• Variocele: hinchazón de las venas que drenan el testículo que reduce la calidad de los espermatozoides.
• Infección: algunas infecciones pueden interferir en la producción o salud de los espermatozoides.
• Problemas de eyaculación: uno de los problemas puede ser la eyaculación retrógrada, cuando el semen entra en la vejiga.
• Medicamentos: algunos medicamentos pueden causar problemas de eyaculación como los que se dan para la presión arterial, conocidos como alfabloqueadores.
• Anticuerpos antiespermatozoides: células del sistema inmunitario que identifican erróneamente a los espermatozoides e intentan eliminarlos.
• Tumores: el cáncer y tumores no malignos pueden afectar los órganos reproductores. La cirugía, radiación y quimioterapia también pueden interferir en la fertilidad.
• Testículos no descendidos: la disminución de la fertilidad es más probable en hombres con esta afección.
• Desequilibrios hormonales: alteraciones en el hipotálamo, la glándula pituitaria o sistemas como la tiroides y la glándula suprearrenal pueden afectar la producción de espermatozoides.
• Defectos de los túbulos que transportan los espermatozoides: estos pueden bloquearse por una lesión durante una cirugía, una infección, traumatismo o desarrollo anormal.
• Defectos cromosómicos: trastornos como el síndrome de Klinefelter, la fibrosis quística, el síndrome de Kallmann y el síndrome de Kartagener pueden afectar la fertilidad.
• Enfermedad celíaca: puede provocar esterilidad masculina.
• Cirugías previas: algunas intervenciones que pueden afectar son la vasectomía, reparaciones de una hernia inguinal, cirugías de escroto o testículos, de próstata y abdominales.

Sin embargo, la producción de espermatozoides y su funcionamiento también se pueden ver alterados por factores ambientales, tales como.

• Sustancias químicas industriales.
• Exposición a metales pesados.
• Radiación o rayos X.
• Calor excesivo en los testículos.

En el último punto, desde la Clínica Mayo ejemplifican con estar sentado por periodos largos, usar ropa ajustada o usar por bastante tiempo un computador portátil apoyado en el cuerpo, lo que puede subir la temperatura de la zona y reducir la producción de espermatozoides.

Otras causas para el bajo conteo de espermatozoides también involucran los siguientes factores:

• Consumo de drogas.
• Consumo de alcohol.
• Tabaquismo.
• Estrés emocional.
• Depresión.
• Obesidad.
• Problemas con el análisis del líquido seminal.

Dependiendo del problema identificado, los tratamientos pueden corresponder a los siguientes:

• Cirugía: es posible corregir una obstrucción en los conductos. Las vasectomías también pueden revertirse.
• Tratamiento de infecciones: a través del uso de antibióticos, aunque no necesariamente mejorará la fertilidad.
• Tratamiento de los problemas en las relaciones sexuales: con medicamentos o asesoramiento que mejore los trastornos como disfunción eréctil o eyaculación precoz.
• Tratamientos hormonales: se podrían recetar medicamentos en casos de infertilidad.
• Técnicas de reproducción asistida: se puede obtener la esperma para realizar una fecundación in vitro o una inyección intracitoplasmática de espermatozoides.