Altas temperaturas, sequías, pero también lluvias intensas e inundaciones. Las consecuencias del cambio climático están comenzando a manifestarse con fuerza en el planeta, por lo que las ciudades deben comenzar a prepararse para resistir y evitar desastres, como pérdidas materiales y humanas.
Como solución, un grupo de investigadores de la Universidad Católica (UC) propuso combatir las inundaciones con la implementación de techos y muros vegetativos, que, además de gestionar las aguas, también pueden moderar las temperaturas y la eficiencia energética.
Cómo las plantas en el techo y muros pueden proteger al país de una inundación
En el libro Techos y Muros Vegetativos para Chile, el grupo de investigadores exploró los beneficios que tendría implementar estos proyectos en el país, en especial, pensando en el cambio climático y sus impactos.
Así, tener plantas en los techos y paredes sería una alternativa que, de implementarse en la planificación urbana, podría evitar distintos desastres y, al mismo tiempo, hacer que la ciudad sea “más sustentable y resiliente al cambio climático”, según Sergio Vera, profesor de Ingeniería UC.
En general, los beneficios de los techos y muros vegetativos son:
- Enfrían el aire: mitigan el “efecto de isla de calor urbano”, ayudando a que las ciudades sean más resilientes al clima y protegiendo a las personas con mayor riesgo a este fenómeno.
- Reducen los costos de energía: mejoran la regulación de temperaturas en edificaciones durante verano e invierno, lo que reduce el uso de aire acondicionado, por ejemplo.
- Protegen de las inundaciones: pueden retener y absorber agua durante los eventos de precipitaciones, al contar con plantas que ayudan a la absorción de la humedad de forma segura.
- Filtran el agua: permiten eliminar elementos contaminantes del ambiente que pueden afectar la calidad del agua potable.
- Reducen el estrés: brindan un alivio para los residentes de una ciudad, a través numerosos beneficios fisiológicos que tiene estar cerca de la vegetación.