Qué es cosmeticorexia, la peligrosa adicción infantil y adolescente por la belleza

En los últimos años, la industria de los productos de skincare y belleza han tenido un auge innegable. Para cada tipo de piel existe una vasta gama de artículos que prometen solucionar o disminuir ese problema que tanto nos aqueja.

Aquello también ha sido potenciado por las redes sociales. Tan solo hay que entrar por un par de minutos a cualquier plataforma, como TikTok o Instagram, para encontrarse con un influencer hablando de qué rutina para el cuidado de la piel le ha servido o recomendando algún producto.

Sin embargo, lo anterior ha desatado un problema que puede ser muy grave en la niñez y adolescencia: la cosmeticorexia.

Tal como lo sugiere su nombre, la cosmeticorexia es un concepto que se define como la necesidad compulsiva de comprar y usar productos cosméticos, principalmente los que tienen que ver con el antienvejecimiento.

Quienes desarrollan este problema pueden sentir que en la mañana, día y noche deben utilizar una gran cantidad de artículos para cuidarse el cutis, y si no lo hacen, no pueden hacer su vida con normalidad.

A raíz de la misma viralización de rutinas de belleza en TikTok e Instagram, se ha visto que cada vez más niñas y adolescentes se ven altamente influenciadas por ello y creen que necesitan aplicar varios productos para tener una piel perfecta. Ya no es un simple juego, sino que se convierte en una adicción.

Esta situación ha alertado a los dermatólogos. Una de las razones es que a menudo en las redes se recomiendan limpiadores, cremas, exfoliantes o sérums que resultan muy abrasivos para la piel de una niña, y por lo mismo, pueden desatar una enfermedad cutánea que antes no se tenía.

Según explicó a La Nación Gabriel Noriega, jefe de Dermatología del Hospital Británico de Buenos Aires, algunas de las consecuencias que podrían aparecer por el uso inadecuado de productos son “alergias, hinchazón, manchas, reacciones exacerbadas por el sol y eventualmente quemaduras superficiales sobre el área aplicada”.

El fenómeno incluso se ve en las consultas, relata Noriega, ya que llegan adolescentes con diversos problemas en la piel tras usar “productos sin indicación dermatológica”, que ellas solas se recetaron.

Existen otros efectos graves que podría dejar la adicción a los productos cosméticos. Debido a que la perfección estética se vuelve un ideal constante a alcanzar, es posible que en algún momento se convierta en motivo de ansiedad, disminución en la autoestima e incluso trastornos de conducta alimentaria.

En vista de lo anterior, es necesario comprender cuál debe ser el cuidado adecuado de la piel en la infancia y adolescencia. Los expertos aseveran que es obligación de los tutores saber que una rutina, en esas edades, siempre debe ser muy básica.

Claudia Ponsone Bohn, dermatóloga, expresó al medio Infobae que los únicos pasos que debe tener la rutina son la higiene, protector solar e hidratación, siempre y cuando los productos no tengan “componentes erosivos o químicos que puedan traer consecuencias a nivel físico, como acné, manchas, reacciones alérgicas”.

En el caso de que aparezca cualquier problema en la piel, la primera recomendación es visitar a un especialista y no recurrir a un producto dermatológico al azar, pues podría generar consecuencias indeseadas.