Qué hacer con los alimentos del refrigerador después de un corte de luz masivo

Más de ocho horas duró el corte de luz masivo a lo largo de casi todo el país: desde Arica hasta Los Lagos, más de 19 millones de personas quedaron sin electricidad desde las 15:16 hora local, y en completa incertidumbre de lo que estaba pasando.

Fue mucho más tarde, durante la noche, que se informó que el apagón se debió a una falla eléctrica de la empresa ISA InterChile y que, además, no se sabía con seguridad a qué hora sería la reposición total.

Cerca de las 23:00 horas, aproximadamente el 50% de los hogares afectados recuperó el suministro.

Pero, ¿qué pasa con la comida que se mantuvo en el refrigerador todo este tiempo? ¿Se puede comer normalmente, o es mejor desecharla?

Al menos en los lineamientos de Food Safety (Seguridad alimentaria) de Estados Unidos, indican que el refrigerador puede ofrecer una conservación segura hasta por 4 horas durante un apagón.

Si han pasado más de 4 horas y la electricidad no vuelve, lo mejor será desechar alimentos perecederos que están contenidos en el refrigerador, como carne de res, pollo, pescado, huevos y sobras de comida.

“Después de un apagón, nunca pruebe los alimentos para determinar su seguridad. Deberá evaluar cada elemento por separado. Si tiene dudas, ¡deséchelo!”, aseguraron desde el sitio de Food Safety.

Además, desde la Secretaría Regional Ministerial de Salud de la región Metropolitana, indicaron que la recomendación general es que si los alimentos se han descongelado, no volver a congelarlos.

Y los que se encuentren a temperatura ambiente que requieran refrigeración por más de dos horas, es mejor no consumirlos.

“Los alimentos más riesgosos con pérdida de temperatura segura son los pescados, mariscos, lácteos y carnes”, informaron desde su perfil de Instagram.

En paralelo, Food Safety explicó que si el refrigerador está lleno, es posible que pueda mantener una temperatura segura por aproximadamente 48 horas. Si es que está medio lleno, puede ser seguro por 24 horas. Todo esto, siempre y cuando la puerta haya permanecido cerrada.

No obstante, si quedan dudas, desde Food Safety entregaron unas listas guía de los alimentos que deben ser desechados según las horas en las que el hogar estuvo sin electricidad.

• Carne de res, pollo, mariscos (crudos o sobrantes cocidos) y sustitutos de carne de soya: DESECHAR.
• Carnes de res o de ave descongeladas: DESECHAR.
• Ensaladas: carne, atún, langostinos, pollo o huevos: DESECHAR.
• Salsa, relleno, caldo: DESECHAR.
• Fiambres, salchichas, tocino, embutidos, carne de res deshidratada: DESECHAR.
• Pizzas de cualquier variedad: DESECHAR.
• Jamones con etiqueta “Conservar refrigerado”: DESECHAR.
• Carnes y pescados enlatados, abiertos: DESECHAR.
• Guisados, sopas y estofados: DESECHAR.
• Quesos blandos como azul, Roquefort, Brie, Camembert, Cottage, queso crema, Edam, Monterey Jack, requesón, mozzarella, Muenster, Neufchatel, queso blanco, queso fresco: DESECHAR.
• Quesos duros como Cheddar, Colby, suizo, parmesano, provolone, romano: CONSERVAR.
• Quesos procesados: CONSERVAR.
• Quesos rallados: DESECHAR.
• Quesos reducidos en grasas: DESECHAR.
• Rallado parmesano, romano o combinación (en lata o frasco): CONSERVAR.
• Lácteos como leche, crema, crema agria, suero de leche, leche condensada, yogur, ponche de huevo, leche de soja: DESECHAR.
• Mantequilla, margarina: CONSERVAR.
• Leche de fórmula para bebés, abierta: DESECHAR.
• Huevos frescos, huevos duros, platillos con huevo, productos elaborados con huevo: DESECHAR.
• Natilla y budines, quiche: DESECHAR.
• Frutas frescas, cortadas: DESECHAR.
• Frutas frescas sin cortar: CONSERVAR.
• Jugos de frutas, abiertos: CONSERVAR.
• Frutas enlatadas, abiertas: CONSERVAR.
• Frutas secas, pasas, frutas confitadas, dátiles: CONSERVAR.
• Coco en rodajas o rallado: DESECHAR.
• Salsas, productos untables, mermeladas, mayonesa, salsa tártara, salsa de rábano picante abiertas: DESECHAR.

• Mantequilla de maní: CONSERVAR.
• Gelatina, salsa de pepinillos, salsa para tacos, mostaza, salsa de tomates, aceitunas, pepinillos: CONSERVAR.
• Salsas de pescado, salsa de ostras: DESECHAR.
• Aderezos a base de vinagre abiertos: CONSERVAR.
• Aderezos a base de crema abiertos: DESECHAR.
• Salsa para espagueti, abierta: DESECHAR.
• Pan, pasteles, galletas, pastas, granos, muffins, panes rápidos, tortillas: CONSERVAR.
• Galletas, panecillos, masa de galletitas para refrigerador: DESECHAR.
• Pastas, arroz, papas cocidas: DESECHAR.
• Ensaladas de pasta con mayonesa o vinagreta: DESECHAR.
• Pastas frescas: DESECHAR.
• Pastel de queso: DESECHAR.
• Alimentos para el desayuno: waffles, panqueques, roscas: CONSERVAR.
• Tartas y pasteles, pastelillos rellenos con crema: DESECHAR.
• Tartas: cualquier relleno que contenga huevo o leche, como con flanes, tartas de queso, quiche o con rellenos aireados a base de huevo y leche: DESECHAR.
• Verduras frescas cortadas: DESECHAR.
• Verduras frescas sin cortar: CONSERVAR.
• Hongos, hierbas, especias frescas: CONSERVAR.
• Vegetales de hojas verdes, precortados, prelavados, envasados: DESECHAR.
• Verduras cocidas: DESECHAR.
• Tofu cocido: DESECHAR.
• Jugo de vegetales, abierto: DESECHAR.
• Papas al horno: DESECHAR.
• Ajo en aceite: DESECHAR.
• Ensalada de papas: DESECHAR.
• Guisados, sopas y estofados: DESECHAR.

Ante la duda, lo mejor será desechar el alimento. Desde Food Safety recomiendan no comprobar la seguridad de una comida probándola después de un apagón, pues los riesgos de una intoxicación alimentaria son altos.

“Si tiene dudas, ¡deséchelo!”.